Esta semana Hillary Clinton, candidata a las elecciones primarias del partido republicano comenzaba su actividad en la red social ‘más trendy’, Instagram. Este nuevo canal de comunicación servirá, en palabras de su equipo para conocer los entresijos de la campaña de la mujer de Bill Clinton en su carrera hacia la Casa Blanca. Pero Hillary no es la única que se ha sumado a la red social más vanidosa. En España Pedro Sánchez, Pablo Iglesias, o González Pons son adictos al ‘postureo’. Repasamos algunos de los perfiles de políticos en Instagram.
Instagram llegó en 2010 y cambió el panorama de las redes sociales, hoy se está convirtiendo en el formato publicitario favorito de muchas marcas de moda y está transformando la comunicación a través de la humanización de los contenidos y la trascendencia de la instantaneidad. Actualmente cuenta con más de 300 millones de usuarios, adelantando así a twitter, y una media de 70 millones de fotografías al día. Instagram ha logrado convertirse en una red social dónde las marcas son un amigo más y donde la imagen triunfa sobre las letras.
También los políticos se han sumado a la moda de conectar con sus audiencias a través de esta red social. Desde Estados Unidos, pioneros en muchas de las estrategias de Comunicación política en redes sociales. La última en sumarse ha sido Hillary Clinton que ahora vuelve a embarcarse en la carrera a la presidencia de los Etados Unidos. Una de las causas que hicieron perder la carrera presidencial a Hillary Clinton en 2008 probablemente fue su aspecto duro de cara al electorado. Una imagen que ahora quiere eliminar y, para conseguirlo, ha contratado a la responsable de la imagen de la mismísima Michelle Obama entre 2010 y 2013, Kristina Schake, la misma que puso en marcha el perfil en Instagram de Michelle Obama o su marido. Por el momento Hillary asegura en su perfil de Instagram que es una ‘abuelita’ y que a través de la cuenta dará detalles no vistos durante una campaña política.
Pero no solo en Estados unidos los políticos se han sumado a Instagram. En España también la red social se ha convertido en el nuevo caballo de batalla por los votantes. Lo cierto es que la red social permite acercarse a un electorado muy joven y eso los encargados de las campañas de comunicación política patria lo saben. Sorprende ver a Mariano Rajoy en su perfil oficial, palo-selfie en mano, colgando una foto. O Pedro Sánchez, líder del PSOE, que no tiene ningún rubor en fotografiase de cualquier guisa. Uno de los políticos con más ‘postureo’ es, sin duda, Esteban González Pons desde las filas populares, quien no duda en subir fotos de lo más vintage con comentarios muy bucólicos. El que no lo hace bastante bien es el ‘rey de las redes sociales en política’, Pablo Iglesias. De hecho, el perfil del líder de Podemos ni siquiera está validado por Instagram y apenas cuenta con 300 seguidores. Más romántico aparece en su perfil de Instagram el secretario general de Izquierda Unida, Alberto garzón, que no duda en mostrar su lado más personal en la red social.
A nivel internacional otros políticos se han sumado a la moda de Instagram con más o menor éxito. Angela Merkel también es adicta a los post en Instagram, aunque la canciller alemana es más dada a la comida y los paisajes en sus fotos. Por su parte Silvio Berlusconi aprovecha la red social para narrar sus venturas y desventuras por recuperar el mando en la política italiana y son constantes sus fotos en despachos y con ropa informal. Hasta el Dalia Lama se ha sumado a la red social de los más ‘egocéntricos’.
