SANTIAGO (27/10/04) La integración de ambas compañías (VTR y Metrópolis) significa que el nuevo conglomerado controlará el 88% del mercado chileno. Una situación que no es bien vista la población y algunos políticos, que temen abusos de posición dominante y alzas de tarifas a los usuarios en su nueva condición de empresa monopólica.
El Tribunal de Defensa de la Competencia ha fallado a favor de las dos operadoras, señalando que al menos el momento no se presentan problemas de monopolio. El tribunal ha optado la autorregulación, algo que no ha caído nada de bien, entre las esferas políticas y de consumidores chilenos.
En respuesta, el propio ministro de Economía del país, Jorge Rodríguez ha señalado que las acciones de la nueva compañía deben ser seguidas “con mucho detalle” para evitar abusos de posición dominante.
Según informa la prensa local, entre otras cosas la fusión significa que Liberty Media que controla ambas empresas se lanzará en una fuerte competencia ya no TV pago (donde son los únicos) sino que en los mercados de banda ancha y telefonía fija con la filial de Telefónica, CTC. Ello debería significar a la larga una baja de las tarifas que pagan los clientes y una mejora en los servicios que ofrecen las empresas del sector.
No obstante, nadie se cree que frente a la ausencia de competidores, las actuales tarifas se mantengan inalterables y que además el servicio actual mejore sustancialmente.