La popularización de Intet ha conseguido que la mayoría de los hogares cuenten con ordenadores conectados a la Red.
La popularización de Intet ha conseguido que la mayoría de los hogares cuenten con ordenadores conectados a la Red. En un principio, navegar Intet era demasiado caro como para hacerlo mero divertento, pero la amplia oferta de conexiones de banda ancha y de tarifas planas ha conseguido que en los hogares donde existe un ordenador, casi todos los miembros de la familia tengan su propia cuenta de correo electrónico o busquen información en la Red de forma sistemática.
Por supuesto, esto incluye a los niños y adolescentes, quienes han encontrado en Intet un entreteniento de silar magnitud al que puede tener la televisión. No es extraño, tanto, que estudios como el realizado BBC Online Network (“Little supervision for online kids in UK”), revelen que sólo en Reino Unido, el 70% de los menores tiene acceso a Intet desde casa, y de éstos, más del 52% invierte un míno de cinco horas semanales en navegar.
Una de las principales virtudes de Intet es su pluralidad. En la Red de Redes, todos los usuarios y todos los contenidos tienen cabida, lo que enriquece a Intet y lo que, al mismo tiempo, la hace potencialmente peligrosa para niños y adolescentes. Cada vez con más frecuencia aparecen noticias en relación con nografía infantil en Intet o de abusos sexuales a menores con los que se ha contactado a través de la Red. Por otra parte, existe el problema de la facilidad de acceso a contenidos claramente inadecuados, según qué edades. La actual situación de Intet permite que un niño pueda acceder a páginas con cualquier tipo de temática, desde aquellas que indican como fabricar bombas caseras, hasta otras que muestran todo tipo de aberraciones sexuales. Como dato a destacar, 9 de cada 10 niños de edades comprendidas entre los 8 y los 16 años, han visto nografía en Intet. En la mayoría de los casos, el acceso a este tipo de contenidos se ha producido a través de búsquedas en Intet sobre temas que no tenían nada que ver.
El 44% de los menores que navegan con regularidad se han sentido acosados sexualmente en Intet en alguna ocasión, y el 11% ha reconocido haber sido vícta de esta situación en diversas ocasiones. A veces, las ofensas pueden tomar la forma de insultos parte de otros internautas, o de correos no solicitados con contenidos desagradables.
Indudablemente, Intet conlleva tantes beneficios para la formación infantil y juvenil, ya que estamos hablando de la mayor recopilación del saber humano que jamás haya existido. Por eso no parece una medida acertada restringir completamente el acceso a la Red, pero sí sería conveniente una regulación de los contenidos o de los sitios a los que niños y adolescentes pueden acceder. Algunos Gobiernos han hecho intentos regular los contenidos que pueden estar accesibles en la Red, pero se trata de un tema muy complicado para ser tratado de forma general. Por ello, en realidad, la responsabilidad del uso que hagan los menores de Intet recae, de forma exclusiva, en los padres o tutores.
Tal vez su novedad, o que muchos adultos no están familiarizados con las nuevas tecnologías, se observa con mucha frecuencia como los padres regulan los contenidos que sus hijos pueden ver en televisión, pero no ponen ningún tipo de traba a la hora de las conexiones a Intet. Por eso, es fundamental que los adultos conozcan los peligros de Intet, antes de permitir que sus hijos pasen hora tras hora delante del ordenador.
Una medida básica para preservar la seguridad de los niños en sus conexiones a la Red es contar con una suite de seguridad instalada en el ordenador, que lo proteja frente a posibles ataques parte de virus e intrusos. De esa manera, puede evitarse el robo de datos personales como nombres, direcciones, números de teléfono e, incluso, datos bancarios que puedan ser utilizados para realizar estafas. Además de ello, es muy conveniente utilizar algún sistema de control parental como el que incluye la suite antalware Platinum Intet Security 2005. Este sistema de control de acceso web permite a los padres restringir el acceso de sus hijos a sitios con contenidos inapropiados, como pueden ser aquellos relacionados con violencia, nografía, etc.
Por otra parte, es necesario que los padres expliquen a sus hijos los peligros que pueden acecharles durante sus conexiones a Intet, así como plantar reglas básicas que preserven su seguridad, tales como:
Marcar horarios y duración de las conexiones.
No procionar nunca datos personales a través de la Red.
No aceptar material enviado desconocidos, y no ejecutar ningún archivo de procedencia dudosa.
No citarse con personas desconocidas.
No efectuar nunca compras online sin consultar antes a sus padres.
