Iberdola aumentó su beneficio neto hasta los 1210 millones de euros, lo que supone un incremento respecto a 2003 de un 14,2%. Las claves de estos resultados se fundamentan sobre todo en un incremento de las inversiones, una mejora de la eficiencia, más calidad y una mayor solidez del balance.
Iberdola aumentó su beneficio neto hasta los 1210 millones de euros, lo que supone un incremento respecto a 2003 de un 14,2%. Las claves de estos resultados se fundamentan sobre todo en un incremento de las inversiones, una mejora de la eficiencia, más calidad y una mayor solidez del balance.
En el apartado de inversiones, más del 80% se realizaron en territorio nacional, y fueron destinadas a instalar centrales de ciclo combinado y renovables. Mientras tanto, el apalancamiento financiero disminuye 100 puntos básicos, situándose definitivamente en el 54,8% en 2004.
Así mismo, la producción del grupo aumenta un 13,9%, a la vez que se produjo una renovación del parque, ya que el 70% de la electricidad generada con tecnologías lpias.
Por últo, destacaremos el creciento de beneficios y dividendos: mejora del ebitda (+9,25%) y el ebit (+10,7%); el dividendo propuesto alcanza los 0,768 € acción (+14,3%), en línea con el beneficio neto.
