Desde la llegada del Partido Popular de Esperanza Aguirre a Telemadrid la tele de todos los madrileños ha cambiado mucho. Sí, es cierto que ya no hay Telebasura. Pero hay caspa, mucha caspa. Y no sabemos qué es peor…
Desde la llegada del Partido Popular de Esperanza Aguirre a Telemadrid la tele de todos los madrileños ha cambiado mucho. Sí, es cierto que ya no hay Telebasura. Pero hay caspa, mucha caspa. Y no sabemos qué es peor…
Porque el que los índices de audiencia no remonten no es sólo culpa de que ya no haya Telebasura, sino que las propuestas que se hacen no gustan nada. Desde la mañana a la noche. ¿Apostamos? Los informativos tienen un aire facha (en el peor sentido de la palabra) que ha conseguido que mucha gente deje de ver Telemadrid. Además Agustín de Grado y José Antonio Ovies han conseguido tener una redacción en pide de guerra con un tema tan delicado para la Comunidad de Madrid como es el 11M. Es motivo de cese inmediato, haya o no habido manipulación, que éste es el tema de otro artículo.
Pero aparte, miremos la parrilla: Cristina Tárrega con un programa hecho para ancianos (cuando no se desmaya, se desalienta, se desinhibe…), Curry Valenzuela con un debate (Alto y Claro) absolutamente lamentable que no sabe moderar (¿nadie le ha dicho a esta mujer que ni sabe ni puede presentar un programa de televisión, que: ¿qué hace metiéndose en camisas de once varas?), Gran Vía: Marta Robles con un programa en el que no sabe dónde se anda. La joya de la corona, Madrid Directo, ninguneado a más no poder (¿nadie se ha dado cuenta de que es lo que más share ata a la Cadena?), y con una agen lamentable y descuidada. Sin comentarios del programa Metro a Metro. Y una serie como Capital (que podría ser Arrayán o El Cor de la Ciutat para Telemadrid) que no arranca que la Cadena no lo hace. Fútbol es Fútbol ha perdido tanto a Reyero como sus señas de identidad. Y mejor ni hablar De Cine o del programa de Sánchez Dragó. Y si nos ponemos a hablar de los programas para jóvenes… Madrid más joven es sencillamente inclasificable, en el peor sentido del término.
En resumen, que para ser la televisión de la Comunidad más poblada y más rica de España, Telemadrid ha pasado a ser un bastión a defender de nadie sabe qué. Muy en línea con lo que defiende Esperanza Aguirre. Por tanto, enhorabuena Manolo… tu sillón no peligra, aunque muchos quieran en tu casa.
