Es tan necesario cuidar la salud psíquica de nuestros hijos como la salud física, ya que el creciento armónico y bienestar es psicofísico. Para ello vamos a recordar ciertas pautas que pueden funcionar como signos de alarma para tomar a tiempo los problemas, que los niños también pueden sufrir estrés y diversos conflictos.
Es tan necesario cuidar la salud psíquica de nuestros hijos como la salud física, ya que el creciento armónico y bienestar es psicofísico.
Para ello vamos a recordar ciertas pautas que pueden funcionar como signos de alarma para tomar a tiempo los problemas, que aunque la infancia parece ser ese momento idealizado de la vida donde todo es juego y placer, los niños pueden sufrir estrés y diversos conflictos.
Por ello debemos estar atentos y consultar a nuestro pediatra o psicólogo, dependiendo del caso, cuando:
- No habla a partir de los 2 años.
- No logra jugar y entretenerse solo a partir de los 3 años.
- Se hace pis o caca enca durante el día, siendo incapaz de pedirlo, más allá de los 3 años.
- Moja la cama de noche pasados los 5 años.
- No se integra al grupo de niños, no juega con otros a partir de los 4 años.
- Sufre crisis de llanto o nervios al separarse de sus padres, una vez superado el período de adaptación a la guardería.
- No puede participar en juegos que plican seguir reglas y esperar su turno, a partir de los 6 años.
- Tiene sobrepeso.
- Se aburre con frecuencia.
- Se lo nota triste o apático.
- Está irritable, enfadado, agresivo o disconforme muy a menudo.
- Está muy inquieto y distraído, lo que interfiere su aprendizaje y rendiento escolar, a partir de los 5 años.
- No responde a las consignas estando en un grupo, a partir de los 5 años
- Se bloquea ante situaciones de prueba, exámenes, etc.
- No sota equivocarse, cometer errores en sus trabajos o perder en los juegos, se enfada, tiene berrinches, rompe cosas; desde los 5 años.
