Está comprobado que en Telemadrid no dejan de crecer los enanos. Aburridos de la corruptela perante en el Ente desde la llegada del hombre que susurraba a las secretarias, los responsables de las secciones de Nacional y Sociedad de los servicios informativos de la cadena han decidido presentar su disión, debido a las presiones recibidas desde el pasado 11 de marzo.
Está comprobado que en Telemadrid no dejan de crecer los enanos. Aburridos de la corruptela perante en el Ente desde la llegada del hombre que susurraba a las secretarias, los responsables de las secciones de Nacional y Sociedad de los servicios informativos de la cadena han decidido presentar su disión, debido a las presiones recibidas desde el pasado 11 de marzo.
Además de la exclusiva que os adelantábamos esta mañana acerca de la tórrida (o, mejor dicho, sórdida) renovación de Cristina Tárrega en la cadena, Telemadrid sigue estando lamentablemente de actualidad. Según informa la Cadena Ser, el jefe de la sección de Nacional Javier Bosque, la subdirectora de la sección Begoña Méndez y el jefe de la sección de Sociedad Pedro Guzmán harán efectiva su disión durante las próxas fechas, a consecuencia de las reiteradas presiones sufridas desde la emisión del ya célebre retaje del 11 M.
Concretamente, estas presiones vendrían dadas no cumplir las expectativas de “afinidad ideológica con el PP“, que la cúpula dirigente entiende que todo buen empleado debe cumplir.
Pero eso no es todo: Luis Mariñas, anterior conductor de ‘Los Desayunos de TVE‘ y hasta la fecha presentador de la segunda edición del Telenoticias en la autonómica, dejará su puesto a comienzos de la próxa temada, aunque según indica el diario La Razón, el periodista se vería recompensado con un programa de debate social.
La marcha de Mariñas, contratado para sustituir al soífero Germán Yanke (quien cierto ha entrado en la terna de la que saldrá el sustituto de Soriano) al frente del informativo, es una nueva muestra de la horrorosa planificación del Ente Público, que no deja de dar palos de ciego en pos de echar una mano a sus amigos.
Esta últa decisión guarda cierta silitud con el cese de Marta Robles, puesto que en ambos casos se ha querido ‘recompensar’ los servicios prestados ofreciéndoles otro programa en la parrilla de la autonómica.
