El Anís Estrellado ya no sería necesario para elaborar Tamiflu

Publicidad

Tal y como os contamos hace unos meses, el Anís Estrellado, también conocido como Anís de China es la especia a partir de la cual se extrae un ácido que tras un largo proceso se transforma en oseltamivir, compuesto principal del Tamiflu. El problema es que se necesitan grandes cantidades de Illicium anisatum Lour (Anís estrellado) para elaborar Tamiflu y al parecer Roche consume el 90% de toda la producción del planeta. La buena noticia es que investigadores japoneses parecen haber desarrollado una fórmula para producir en antiviral sin necesidad de este ingrediente.

Tal y como os contamos hace unos meses, el Anís Estrellado, también conocido como Anís de China es la especia a partir de la cual se extrae un ácido que tras un largo proceso se transforma en oseltamivir, compuesto principal del Tamiflu. El problema es que se necesitan grandes cantidades de Illicium anisatum Lour (Anís estrellado) para elaborar Tamiflu y al parecer Roche consume el 90% de toda la producción del planeta. La buena noticia es que investigadores japoneses parecen haber desarrollado una fórmula para producir en antiviral sin necesidad de este ingrediente.

 

El Tamiflu fue desarrollado y patentado en 1996 en California la biotecnológica Gilead Sciences Inc (uno de cuyos mayores accionistas es el Secretario de Defensa  estadounidense, Donald Rumsfeld), pero Roche tiene los derechos de fabricación y ventas hasta el 2016.

 

En la base de este antiviral está  el  anís estrellado, una planta utilizada como condento en muchas partes del planeta, y de la cual, mediante un largo y complejo proceso, se extrae el ácido shikímico, componente clave del oseltamivir, principio activo del Tamiflu.

 

El principal problema, al menos hasta ahora,  es que Roche consume el 90% del anís estrellado del planeta y precisa de más de 12 meses de elaboración. Sin embargo, según una noticia publicada Yomiuri Shbun, uno de los periódicos más prestigiosos de Japón y la agencia Kyodo News, un grupo de científicos japoneses, liderados Masakatsu Shibasaki, ha anunciado un nuevo método que aseguraría la producción del antiviral en caso de que la demanda de anís estrellado no pueda cubrir necesidades. El proceso consistiría en reemplazar el ácido shikímico 14 ciclohexadieno, una sustancia derivada del petróleo que puede ser desarrollada a muy bajo costo.

 

Seguiremos Informando…

 

 

Publicidad
Publicidad
Salir de la versión móvil