Pedro Piqueras: el Schuster de los Telediarios. Ha vestido el traje de las tres cadenas de televisión más tantes. En Antena3, además, se permitió la licencia de dirigir magacines como ‘Espejo Público’ o ‘7 días, 7 noches’. Pero él sabe que su destino está en la mesa de los españoles: con el mantel a rayas, la bagette del mediodía y el vaso de vino tinto. En su prer telediario en Telecinco los números fueron silares a los de Valentín, un 16%, aunque los cambios ya se comenzaron a notar. Veremos que dicen las audiencias en el futuro
Pedro Piqueras: el Schuster de los Telediarios. Ha vestido el traje de las tres cadenas de televisión más tantes. En Antena3, además, se permitió la licencia de dirigir magacines como ‘Espejo Público’ o ‘7 días, 7 noches’. Pero él sabe que su destino está en la mesa de los españoles: con el mantel a rayas, la bagette del mediodía y el vaso de vino tinto.
Decía un sargento cuyo apellido acapara los jueves y vies de Telemadrid que es lo que tienen las audiencias: que en el fondo se acostumbran. Piqueras es al Telediario –en su concepto de informativos lo que Maldonado al Tiempo. Los encasillamientos a los que los telespectadores someten a toda figura televisiva son rigurosos y herméticos.
Es lo que tiene la audiencia: que se acostumbra. El ahora director general de Informativos Telecinco aseguró que la duración del formato será de unos veinticinco minutos. ‘En Estados Unidos los informativos de las grandes cadenas duran 20 minutos si se resta el tiempo dedicado a publicidad. Considero que los informativos son demasiado largos en España y, además, hay estudios que demuestran que el espectador sólo recuerda entre 4 y 7 noticias de todas las ofrecidas, lo que un buen informativo, un informativo suficiente, sería de 25 minutos’, proclamó Piqueras.
Como novedad, Piqueras explicó también que, en esta nueva etapa, Informativos Telecinco pulsará la opinión de la gente a través del planteamiento de una pregunta concreta al principio del informativo, y cuyo resultado se expondrá al final del mismo. ‘Es difícil hablar de hacer un informativo interactivo pero esta iniciativa, que ya se viene haciendo en algunos medios digitales, es un buen indicativo del pensamiento de la gente’.
La últa propuesta que vamos a analizar es la plantación de la figura del conductor en el exterior, que estará representada Ángeles Blanco. Piqueras considera que es un rostro que se identifica mucho con Telecinco y que, tanto, al contar con su presencia en el exterior, el espectador ‘sabrá que Telecinco está en el lugar de la noticia’.
Tiene razón Piqueras al afirmar que los Informativos Telecinco tienen su credibilidad bien ganada. Pese a tímidos intentos hacerlo, ha decidido no llevar a cabo una revolución en una redacción bien conformada. ‘Que nadie espere grandes movientos, pero sí cambios en las ediciones y algunas propuestas novedosas’, avisaba. Vasile, mientras tanto, le tendía la alfombra roja, que abogaba ‘ el cambio’ parar dotar de ‘mayor visibilidad’ al proyecto. A grandes rasgos, quieren hacer unos informativos para todos los públicos, pero los públicos son, en el fondo, tan tradicionales como exigentes.
Cambiar el formato al uso de los servicios informativos de una cadena concreta no es un asunto que se pueda tomar a la ligera, que jamás se puede permitir uno un paso en falso en este aspecto. Los Informativos constituyen el espejo de todo canal de televisión, sus valores y su declaración de principios. Si Piqueras, en su extraña posición de progreshowman, se hunde, Telecinco entera irá tras él. Aciertos como la inclusión de Ribagorda en la plantilla pueden verse empañados el fracaso del experento.
Ayer, en su prer día, el share les colocaba en un 16%. Antena3 era líder de informativos con casi un 25% y la Prera se plantaba en un 22% de cuota de pantalla. Piqueras firmaba los mismos números que Gabilondo el día de su estreno. Pedro Valentín hacía las maletas que le colocan un poco más allá del mismo pueblo de Fuencarral. ‘Es lógico que los rostros de la información sean víctas de la audiencia. Todo el mundo tiene que aspirar a tener el mayor público posible, pero los informativos no tienen que desvirtuarse como informativo para tener más público’, decía Valentín. A eso se le llama morir matando.
Puede que Valentín haya dicho esto desde el despecho y la dignidad profesional. Concedámosle la duda de que lo haya dicho como espectador. Tiene derecho. Como decía el sargento Tárrega, ‘es lo que tienen los gatos, que son muy suyos’. Casi tanto como las audiencias. Que se acostumbran a todo.
Seguiremos Informando…
