LIMA (09/08/06) Una vez que el personal del Instituto de Medicina Legal declararan “apto” al empresario peruano José Enrique Crousillat, internado en una clínica capitalina, se le informó que tanto él como su hijo José Francisco fueron condenados a ocho años de prisión recibir 24 millones dólares a cambio de apoyar la reelección de Alberto Fujori en 2000.
El ex dueño del canal de televisión, que padece un problema cardiaco, y su hijo fueron extraditados en mayo pasado desde Argentina para que comparecieran ante la Justicia peruana para responder este delito.
Sin embargo, el empresario optó permanecer con los ojos cerrados durante la lectura del fallo, que se prolongó dos horas, hecho que fue calificado como una actitud de “rebeldía” parte de la Sala Anticorrupción. Mientras lo pusieron al tanto de la sentencia condenatoria, su abogado, Jorge Castro, intentó detener la lectura sin éxito.
Bajo la dirección del magistrado José Barandiarán, la Sala Anticorrupción también obligará a Crousillat a pagar 80 millones de soles (unos 24,8 millones de dólares) reparación civil al Estado, además de devolver el monto de dinero ilícito recibido. En total, la suma se acerca a los 50 millones de dólares.
A juicio del magistrado, esta sentencia supone un precedente positivo para el proceso de extradición que se le sigue al ex mandatario Alberto Fujori, que en estos momentos permanece detenido en Chile, y que está acusado de ser el mentor, junto a su ex asesor Vladiro Montesinos, de pagar a los canales a cambio de su apoyo electoral, delito que también ha hecho desfilar los tribunales a varias figuras que trabajaron en ese canal, como la polémica presentadora Laura Bozzo.
