Aunque muchos dudan que las obras de la M30 estén concluidas en seis meses, un estudio revela que gracias a la reforma se ahorrarán 13 millones de horas en atascos anuales. El estudio, realizado el Centro de Investigación de Transte de la Universidad Politécnica, advierte que para que las mejoras sena efectivas habrá que restringir el tráfico en la almendra central.
Según es estudio, “la nueva M30 contribuirá claramente a reducir los principales problemas diagnosticados en esta zona: la congestión, los problemas funcionales del actual trazado, la presión ambiental del tráfico en la zona del río Manzanares y la mejora en los barrios colindantes, así como la tasa de accidentalidad al elinar defectos en algunos tramos en los que se concentran los accidentes”.
La reforma de la M30 mejorará los flujos de tráfico en la ciudad. Según el informe, en la almendra central al año habrá seis millones de horas menos de viajes; 4,1 millones de horas menos en la franja entre la M30 y la M40; 9,8 millones de horas menos en la M40 que es la gran beneficiada, mientras que la M30 aumentará en 2,5 millones los viajes. “Los flujos en la M30 aumentarán fuertemente como consecuencia de su mayor capacidad y mayor rapidez, pero el beneficio para la ciudad es claro con esos 13 millones de horas de ahorro en atascos en todas las otras zonas”.
“Para que este cambio en los flujos de tráfico se produzca es necesario que, además de la ampliación de la M30, se prosiga con la política de restricción en la almendra central“, agrega el estudio. “Hay que continuar con la peatonalización de calles, hacer otras sólo para el transte público y fomentar el carrilbici que en Madrid apenas existe; además de seguir con la política de parquímetros”.
La disminución de coches en la almendra central, en opinión de los expertos, permitirá igualmente que desciendan los niveles de contaminación. Estos valores son muy altos en la ciudad lo que el Ayuntamiento ha elaborado una estrategia medioambiental para reducir las emisiones de 2006 a 2010. Los expertos en tráfico aseguran que en Madrid, con la reforma de la M30, se dejarán de emitir a la atmósfera 35.000 toneladas al año de CO2.
