ASUNCIÓN (05/10/06) Se cumplen ocho meses sin saber nada del paradero de Enrique Galeano. No se sabe si sigue con vida o si ha tenido un desenlace fatal. Se desconoce quiénes están detrás de su desaparición. El tiempo pasa, pero el Sindicato de Periodistas del Paraguay (SPP) volvió a exigir al Gobierno resultados en la investigación.
El comunicador fue amenazado de muerte cuando ejercía sus labores en una emisora de radio en la localidad de Yby Yaú, a 450 kilómetros al noreste de la capital paraguaya y desapareció el 4 de febrero pasado. Para que el caso no pase al olvido, la directiva del SPP se manifestó en Asunción sus exigencias a la Fiscalía y a la Policía para esclarecer el caso.
El secretario general del sindicato, Julio Benegas, dijo que la Policía tiene ‘archivados’ los antecedentes sobre esa desaparición y atribuye el poco interés en el caso a que la familia no cuenta con recursos suficientes para llamar la atención de las autoridades. ‘¿Cuál es la diferencia entre la desaparición, el secuestro, de Galeano con otros que afectan a poderosos de este país?, y nosotros decos: el dinero, el dinero que mueve toda la estructura judicial y política’, denunció enérgicamente.
Los medios locales atribuyen la desaparición de Galeano a sus denuncias contra las autoridades regionales y sobre la acción de bandas de narcotraficantes en Yby Yaú, en el departamento de Concepción, fronterizo con Brasil.
Ante todo este inmovilismo, una señal esperanzadora. El caso de Galeano ha sido incluido en un informe sobre violaciones de la libertad de información y crímenes contra periodistas de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP).