Telecinco continúa con su posición de liderazgo. La cadena dirigida Paolo Vasile ha logrado cerrar los tres preros trestres del año con un creciento del 7,8% en su beneficio neto y un 4,2% en sus ingresos brutos totales. La cadena de Fuencarral ha logrado mantener su liderazgo y participación de la torta publicitaria, a pesar de la llegada de las nuevas cadenas analógicas y los incipientes cambios del panorama televisivo. Ya no son estos crecientos de dos dígitos a los que nos venían acostumbrando, pero siguen líderes.
Los datos trestrales permiten a Telecinco presumir de ser actualmente la cadena líder de audiencia, facturación, cuota de mercado y márgenes. Los números de Telecinco no son tan boyantes como el año pasado, pero sí reflejan un liderazgo, a pesar de las cambiantes condiciones del mercado televisivo. En este últo año, la cadena ha debido asumir la llegada de dos nuevos competidores analógicos como Cuatro y la Sexta que han apostado fuerte los eventos detivos intentando recortar audiencia e ingresos publicitarios.
Del mismo modo, Telecinco, ha sobrevivido a la puesta en marcha de sus propios canales de TDT y del naciento de nuevos operadores en diversos ámbitos. Con todo, la cadena ha logrado aumentar sus beneficios en un 7,8% durante los preros nueve meses del año, hasta los 229,3 millones de euros, mientras que los ingresos publicitarios brutos totales se elevaron un 4,2% hasta los 685 millones. En cuanto a audiencia, la madre de todos los resultados si hablamos de televisión, Telecinco ha logrado un 21,3% de audiencia en los preros nueve meses del año, frente al 19,8% de Antena 3 y el 18,2% de La Prera.
Según cuenta Telecinco en un comunicado (que nuevamente no nos ha llegado, gracias a la política de silencio del Departamento de Comunicación de la cadena) estos datos demuestran una vez más ‘la eficacia del modelo de negocio de Telecinco, basado en una gestión comercial transparente con un catálogo de productos hechos a la medida de cada cliente y en una estructura de programación concebida para el obtener el liderazgo y la rentabilidad. Para lograr dichos parámetros, Telecinco se ha mantenido fiel a su política de control de costes pese al incremento del número de competidores, con un incremento en línea con la inflación más los costes de TDT un total de 4,7%’.
Lo que no cuenta la cadena es que esta restricción de costes, se ha hecho siempre tirando de los trabajadores. Hace unos meses los sindicatos y la cadena llegaron a un acuerdo de Convenio Colectivo, tras meses de negociaciones, aunque sin lograr parte de las demandas de la plantilla. En cualquier caso, los directivos de Telecinco defienden ciegamente su modelo, un modelo basado en recorte de costes y en una dependencia excesiva de las audiencias.
Como explica el propio Paolo Vasile: ‘La tante distancia que hemos conseguido en audiencia con respecto a las otras televisiones obtenida en un marco de competencia creciente sin alterar el riguroso control de costes que nos caracteriza, es resultado de la labor de un equipo humano altamente plicado en la compañía’ ¿Ha sobrevivido Telecinco al nuevo panorama televisivo? Es pronto para decirlo.
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