la COPE ha sufrido una de las mayores caídas de audiencias de todo el sector. Sus actuales 484.000 oyentes de media significan una caída del 22% en un año, desde casi un millón de seguidores que la emisora tenía hace dos temadas. Como era de esperar el desáno crece en la plantilla, que ve como los planes de relanzamiento de
Cadena 100 se encuentra segunda la cola (sin los datos de Radio 3) en las emisoras musicales nacionales. El dato y los actuales 484.000 oyentes contrastan fuertemente con los 584.000 seguidores de diciembre del año pasado y el millón de oyentes de hace dos temadas. Todas las radiofórmulas, se mantienen o suben, menos la emisora de la COPE. El dato ha sido más sorprendente para la redacción que ha vivido un año sin datos oficiales, debido a la expulsión de la Cadena de los Obispos del EGM durante el año.
Esta situación ha generado el desáno en el equipo y muchos ya se comienzan a preguntar qué sentido tuvo el estudio que hizo una consultoría contratada hace unos meses para reflotar la cadena. Según hemos podido saber, no se tomarán medidas de momento, ya que se considera que la ‘nueva’ programación aún no está asentada, hay que dejar pasar al menos otro trestre y esperar a la siguiente oleada.
En cualquier caso, en la cadena son todo caras largas, morros y casi pésames. Muchos, de hecho, ya piensan en que el desenlace de la cadena sea la reconversión de los postes de Cadena 100 en repetidores de Rock & Gol o de COPE. Otros, en la desaparición de la cadena y el naciento de una nueva radiofórmula. En definitiva, un mal ambiente que desde la COPE no se preocupan de mejorar.
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