A partir de la semana que viene aproxadamente 1 millón y medio de universitarios estarán oficialmente, de exámenes en toda España. Entre los tipos de exámenes, según Isidro Rodríguez, director del Foro de Debates de la Universidad CEU Cardenal Herrera el examen de tipo oral es el más temido los estudiantes, puesto que los nervios, el estrés y el llamado pánico escénico pueden afectar a los alumnos y jugarles una mala pasada en una prueba que les puede servir para preparase para hablar en público.
A partir de la semana que viene aproxadamente 1 millón y medio de universitarios estarán oficialmente, de exámenes en toda España. Entre los tipos de exámenes, según Isidro Rodríguez, director del foro de Debates de la Universidad CEU Cardenal Herrera el examen de tipo oral es el más temido los estudiantes.
Debido a esto, el experto da una serie de claves para pasar estos exámenes. Así, Isidro Rodríguez afirma que los nervios y el llamado pánico escénico se superan ‘haciendo uso de algunas técnicas y trucos y aplicando’ correctamente las normas básicas de expresión oral’.
Algunos de estas técnicas pasan, supuesto, estudiar, actuar con naturalidad y utilizar el sentido común a la hora de responder a las preguntas planteadas el profesor. Los silencios también pueden ser tantes, hay que conocer el tiempo que uno dedica antes de responder y resulta tante no alargar las pausas puesto que el alumno corre el riesgo de parecer inseguro.
Para evitar esa inseguridad, según Rodríguez, el estudiante debe ver el examen oral ‘como una otunidad para demostrar lo que sabe ante el profesor, siempre que el alumno haya preparado la asignatura, y poder aplicar algunas técnicas que el papel no permite’.
Por parte de los profesores, la técnica de los exámenes orales es utilizada no solo para evaluar los conocientos del alumno sino para analizar su comtamiento y sus técnicas a la hora de hablar en público, eso, afirma ‘una buena presentación es fundamental pero no sustituye la preparación del temario’.
Lo tante, para el director del foro de Debate, es tener claro que el profesor en un examen oral es receptivo a las rectificaciones siempre y cuando estos se hagan en un plazo de tiempo razonable y se argumenten.
Otra de las claves para el éxito es intentar que la prueba más que en un examen se convierta en una conversación ya que ‘ésta relación personal crea un ambiente positivo que ayuda al profesor a ponerse en el lugar del alumno y ser más comprensivo con sus dificultades y litaciones’.
La expresión y los movientos de las manos también son tantes, el alumno debe parecer natural y para ello es necesario ‘mantener siempre las manos a la vista y una posición abierta y relajada, utilizar un lenguaje propio de la asignatura y concreto y mirar siempre a los ojos sin resultar desafiante’.