Como siempre ocurre después de una gran manifestación comienza el baile de cifras entre los convocantes, la Comunidad de Madrid y el Gobierno. En el caso del pasado sábado en la que miles de ciudadanos recorrieron las calles de la Capital la derrota a eta y contra la negociación, esta diferencia en el número de asistentes se ha hecho descarada: millón y medio según la Comunidad de Madrid frente a los 180.000 del Gobierno.
Unas cifras, las del gobierno, que coinciden con las facilitadas la manifestación anterior, del día 13 de enero, en la que no se hacía mención al rechazo contra la negociación con la banda. Sin embargo, lo que no concuerda son las ágenes facilitadas Telemadrid durante las tres horas que duró la marcha. La autonómica fue la única que ofreció en directo el desarrollo de las dos manifestaciones con el mismo despliegue de medios.
Desde luego, los 180.000 asistentes de la prera manifestación no eran los mismos ‘180.000’ de la segunda y el color de la manifestación tampoco. Los reteros de Telemadrid, esta vez sin ser atacados, entrevistaron a varios de los asistentes entre los que se encontraban personas de muy distintas tendencias políticas e ideologías. En la marcha se pudieron ver numerosas banderas españolas mezcladas con comunistas, catalanas, vascas, navarras, ecuatorianas etc… todas unidas la derrota de eta y la no negociación con terroristas.
En cuanto a las cadenas de radio a nivel nacional así como las televisiones, COPE fue la única que siguió en directo la manifestación, recogiendo el testonio de los participantes desde personajes públicos hasta ciudadanos anónos en un tante despliegue de medios.
Lunes de resaca después del 3F y todavía no se han oído voces acusando a la autonómica de manipulación. ¿Será el revuelo producido el despido de un trabajador los incidentes de la huelga de diciembre? ¿Será la falta de argumentos? El caso es que 48 horas después la mayor preocupación de los que no asistieron a la marcha es el gran número de banderas de España que se pudieron ver y el hno de España que sonó al término de la lectura de comunicados en la Plaza de la independencia.
