Brilla su sentido del humor, entereza y la capacidad de hacer algo positivo a partir de una tragedia: el accidente aéreo que enfrentó en octubre de 1972 y que lo dejó a él y a otros quince supervivientes atrapados 72 días en la aridez y las nieves interminables de Los Andes, y que tomaron una decisión dura que no ocultan: alentarse de sus compañeros fallecidos. El relato de esta experiencia sigue emocionando más de 30 años después y ha llevado a Roberto Juan Canessa a ser consultor en liderazgo y Comunicación de crisis.
La intervención de Canessa en el I Congreso Internacional de Comunicación de Salamanca, ha generado una enorme expectación entre los asistentes. Y es que su forma de ser, de contar los menores de su vivencia, ha dejado al auditorio completamente admirado. ‘No sobreviven los más fuertes, sino los que les gusta más vivir’, aseguró.
De su relato se pueden sacar muchas conclusiones que se pueden trasladar al mundo de la Comunicación corativa y a las situaciones de crisis. De hecho, a esto se dedica este médico, que también es consultor. Canessa debió enfrentar una de las prueba vitales más extremas en Los Andes y asumió parte del liderazgo frente a sus compañeros –de los que lograron sobrevivir 16 de un total de 45 personas que viajaban en aquel avión. Algunas claves que se desprenden de su testonio son la necesidad de reconocer la situación real, aprovechar los recursos existentes con grandes dosis de creatividad, lograr aglutinar las expectativas del grupo y, sobre todo, ejecutar el plan. Para Canessa, lo crucial son los resultados, enca de la buena o mala relación que pueda existir en el grupo y de las pasiones humanas. ‘El sentido del humor es lo más tante en los grupos humanos en los momentos de crisis’, aseguró.
Es en esos momentos cuando se hace necesario el surgiento de un liderazgo. Según Canessa, cuya ponencia se titulaba ‘Convicción, relación y coraje. Desarrollo personal, corativo y social’, hay un momento en que una persona logra congregar los sueños y las esperanzas de otras, lo que supone el sacrificio de los propios deseos.
Para este superviviente uruguayo, fue ‘mucho más digno’ aventurarse, ir en busca de una salida, y arriesgarse a perder la vida caminando antes que dirigirse a una muerte segura en la más absoluta pasividad. ‘El mensaje es busca un camino y empieza a caminar. No te quedes en el análisis’. El éxito y el fracaso, a juicio de Canessa, es una valoración relativa.
Dice que su relación con los medios de Comunicación ha sido muy positiva y se mostró agradecido de que, con su labor informativa, hayan logrado que su historia trascienda y aún ponga los pelos de punta a más de treinta años de la tragedia, convirtiéndola en un relato de la fortaleza humana. Y se mostró completamente indiferente sobre el tratamiento morboso o las informaciones escabrosas y, en ocasiones, erradas que han podido emitir algunos sectores de la prensa. ‘Han sido sólo el uno ciento de los medios los que han dicho cosas terribles’.
Al responder a una pregunta sobre la situación actual de la sociedad, manifestó su crítica a la tancia que se le da al ‘packaging’, a lo externo y accesorio. A juicio de Canessa, cada vez resulta más necesario retornar a lo básico de la naturaleza, a lo esencial y recuperar lo que más nos une a la vida. ‘El ser humano, cuando se encuentra en el máxo miseria material, se refugia en la máxa riqueza espiritual’.
Seguiremos Informando…
