Los cambios de vida pueden ayudar a prevenir y controlar la Diabetes tipo 2, que es una de las principales epidemias del siglo XXI ya que se cree que para el 2025 existan más de 380 millones de personas que han desarrollado este tipo de diabetes. Bayer Healthcare y la Federación Internacional de Diabetes,FID, han publicado un consenso sobre el uso de acarbosa (Glucobay) para la prevención de la diabetes cuando los cambios de los hábitos no funcionan sí mismos.
La Federación Internacional de Diabetes ha publicado una nueva declaración de consenso sobre la prevención de la diabetes tipo 2 en la que recomienda considerar el tratamiento con acarbosa (Glucobay) cuando el cambio en los hábitos de vida sí sólo no funciona. Esta guía, publicada en la edición de mayo de Diabetic Medicine, presenta la terapia más ópta para individuos con prediabetes, como expresó un panel de reputados endocrinos internacionales participante en el II Congreso Internacional de Prediabetes y Síndrome Metabólico que tuvo lugar en Barcelona entre el 25 y el 28 de abril.
El profesor Paul Zmet, director del Instituto Internacional de Diabetes y coautor de la declaración de consenso, subrayó la tancia de que médicos y gobernantes actúen cuanto antes. ‘Con 246 millones de diabéticos hoy en día, y una previsión de 380 millones en el año 2025, la diabetes se convertirá en una pesada carga para las economías nacionales. La diabetes tipo 2 se puede prevenir, pero se exige un enorme compromiso político parte de los gobernantes para hacer esto realidad’ comentó Zmet.
‘Existen muchas evidencias de que los cambios en el estilo de vida pueden ayudar a prevenir el desarrollo de la diabetes tipo 2 en pacientes de alto riesgo’ afirmó el profesor Sir George Alberti, anterior presidente de la Federación Internacional de Diabetes y coautor de la declaración de consenso. A lo que añadió que algunos pacientes necesitan farmacoterapia además de las modificaciones del estilo de vida.
Acarbosa y metformina son los únicos fármacos recomendados la Federación Internacional de Diabetes. La recomendación de usar acarbosa está apoyada el ‘Estudio Para Prevenir la Diabetes Mellitus no Insulino Dependiente’ (STOPNIDDM, en sus siglas en inglés).
Éste es un ensayo clínico doble ciego, controlado con placebo y aleatorizado, llevado a cabo en Europa y Norte América con una duración de tres años. El estudio muestra que el tratamiento con acarbosa reduce en un 36% el riesgo de progresión desde prediabetes hasta diabetes tipo 2, al mismo tiempo que incrementa significativamente la tasa de reversión de prediabetes a tolerancia normal a la glucosa. Además acarbosa reduce en un 49% el riesgo de un prer evento cardiovascular, y un 91% el riesgo de infarto de miocardio.
Un nuevo estudio presentado en el II Congreso Internacional de Prediabetes y Síndrome Metabólico, llamado ‘Acarbose Cardiovascular Evaluation’ (ACE), seguirá investigando los beneficios de acarbosa. ACE es un ensayo clínico aleatorizado y controlado con placebo, que evaluará, como variable principal, el efecto de la acarbosa en la aparición de nuevos eventos cardiovasculares (prevención secundaria cardiovascular). Los resultados finales de este estudio se esperan para el año 2013.
