La versión australiana de Gran Hermano ha ocultado a una de sus concursantes la muerte de su padre ante el expreso deseo de éste. La polémica está ahora en saber si la noticia se le dará en directo.
La versión australiana de Gran Hermano ha ocultado a una de sus concursantes la muerte de su padre ante el expreso deseo de éste. La polémica está ahora en saber si la noticia se le dará en directo.
Raymond Coll, de 53 años y enfermo de cáncer, fue enterrado hace unos días después de asegurarse que la noticia no llegaría a oídos de su hija Emma. Al parecer, no quería que su muerte pusiese freno a su carrera hacia el estrellato televisivo.
Coll y su hija estuvieron distanciados varios años, pero recientemente habían recuperado el contacto a través de mensajes vía móvil. Tal vez eso, el señor reiteró su deseo de no perjudicar a su hija mientras se encontrase dentro de la casa.
La polémica está ahora en saber si el programa decidirá dar la noticia a Emma en directo para tener así asegurada la audiencia o tendrá la delicadeza de hablar con ella en privado.
