Cuando el 3 de mayo desaparecía Madeleine McCann de su apartamento en El Algarve tugués, pocos pensaban que un hecho desgraciadamente tan corriente lograría eclipsar la despedida del gobierno de Tony Blair. Desde entonces, más de 135 millones de visitas oficiales a la web oficial, 1,5 millones de libras de recompensa alguna información acerca de su paradero y 1,380.000 entradas en Google son algunas de las cifras del secuestro más famoso del año, que llevará a los padres de la niña a El Vaticano hoy para ser recibidos el Papa Benedicto XIV.
Maddelein McCann es una niña de cuatro años que desapareció el 3 de mayo del apartamento en el que se alojaba con sus padres y dos hermanos en Praia da Luz (Algarve, Portugal). Sin embargo, lo que pocos podían aginar es que su búsqueda se pudiera convertir en uno de los fenómenos mediáticos más tantes de lo que va de década, extendiéndose vertiginosamente el resto del continente europeo a través de una potente campaña mediática auspiciada la prensa sensacionalista británica.
En efecto: la desaparición de ‘Maddie’ (que es como se conoce a la niña), se presentaba como una historia jugosa para medios como The Sun, quienes vieron el filón de la desaparición de una compatriota en tierras extranjeras. A partir de ahí, una web oficial con más de 135 millones de visitas, cuñas de radio en 200 emisoras, mensajes grabados de celebrities como David Beckham, carteles pidiendo su liberación enarbolados la prera plantilla del club de fútbol Liverpool, e incluso una gira a nivel europeo que arranca hoy con la audiencia concedida Benedicto XVI a Kate y Gerry MacCann, padres de la niña.
Sin embargo, toda noticia tiene fecha de caducidad, y es precisamente ese momento el más temido la familia, quien considera que las ya de sí difíciles tareas de búsqueda serían prácticamente posibles sin la colaboración de los medios de comunicación. Esperemos que esta situación no se produzca y que proto tengamos noticias de Maddelein.
Seguiremos Informando…