Este año, la convocatoria de entrega de premios de ‘El Farmacéutico’ y ‘7 días médicos’, que habitualmente se celebraba en el Palau, ha tenido otro emplazamiento. El Liceo de Barcelona se ha vestido de largo no sólo para la entrega de premios, sino también para celebrar el 25 aniversario de Ediciones Mayo. Un acto en el que autoridades y directores de distintos medios del sector, entregaron los galardones a los premiados en presencia de Marina Geli, Consejera de Sanidad de Cataluña y Fernando Puig de la Bellacasa , subsecretario de Sanidad.
Estos premios pretenden reconocer públicamente a personas y entidades que han contribuido a mejorar el ámbito de la farmacia, la medicina, la enfermería, la industria farmacéutica y los medios de comunicación, teniendo muy presente la repercusión social que todo ello comta desde la perspectiva de la sanidad y la salud.
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| Ainhoa Arteta durante su actuación | Foto de familia de los premiados |
Tras la entrega de premios, los invitados tuvieron la suerte de disfrutar de la magnífica voz de Ainhoa Arteta, acompañada al piano Roger Vignoles. Después del recital, la soprano vasca deleitó a los asistentes con el aria ‘Oh mio bambino caro’, de Puccini, que acabó de encandilar al público.
Con el comienzo del cóctel, una parte de los asistentes se abalanzaron hacia el avituallamiento y refrigerios, mientras que otra (la mayoría) salió como alma que lleva el diablo, ante sorpresa de los acomodadores (que no se cansaron de repetir ‘el que salga, no podrá volver a entrar’), dejando el Liceo medio vacío (o medio lleno, según se mire). Eso sí, llevándose los presentes de rigor (una lámina y una caja de bombones), que desaparecieron en un visto y no visto.
Tras largas colas y algún que otro empujón, los invitados fueron cogiendo sus bebidas y apartándose del tumulto acudiendo a otra sala, la de los canapés (que se convirtió en la ‘caza y captura’ de los camareros, debido a la proción inversa entre número de invitados hambrientos y cantidad de canapés). Unos comieron más, otros comieron menos y algunos miembros de Ediciones Mayo, ni siquiera comieron que les tocaba estar con las autoridades en el Salón de los Espejos, lugar al que nunca llegaron los camareros.
Subidas y bajadas las escalinatas del Liceo. Caras conocidas, otras no tanto, y gente muy arreglada que paseaba los recintos del Teatro de la ópera de Barcelona. El ambiente se fue caldeando (y no que se anara la fiesta, sino que quitaron el aire acondicionando), los asistentes se fueron marchando y los festejos acabaron con foto de familia de los redactores de ‘7 días médicos’ y ‘El farmacéutico’, seguida de besos y despedidas.
Al día siguiente, los chicos de Ediciones Mayo siguieron con la celebración del 25 Aniversario, en el Tibidabo, y a pesar de que intentaron ‘colarnos’, esta vez no pudo ser. Pero según hemos podido saber, no faltaron los coches de choque y alguna que otra actividad en las atracciones del Parque. Diversión, relajación en un fin de semana que se salió de lo habitual para los miembros de Ediciones Mayo.
Desde PRSalud felicitamos a los organizadores y todos aquellos que trabajan en Ediciones Mayo anándoles a seguir haciéndolo tan bien.
Seguiremos informando…