La inexistencia de la cobertura médica para los mexicanos que emigran a Estados Unidos es una realidad que afecta a la mitad de ellos. Nada menos que 5,9 millones de ellos no cuenta con ningún tipo de cobertura de salud, lo que recientemente ha cobrado fuerza una propuesta que daría solución al colectivo indocumentado: el Seguro médico binacional.
Esta propuesta, que ha explicado el antropólogo Scott S. Robinson de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), permite el acceso a un programa de seguro popular a través de negociar pólizas colectivas de seguros médicos básicos en ese país con el aval del Seguro Popular o del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
De este modo, el seguro médico en México podría expedir una credencial compatible con los sistemas en Estados Unidos, aunque se trata de un proyecto prelinar que falta delitar para que lo presenten ante que comparte con otro investigador, y que continúa modificando antes de negociarlo con autoridades del Seguro Popular en México y clínicas comunitarias o privadas de condados que puedan crear un plan a corto plazo.
Mientras el resto de la población nativa de Estados Unidos que no tiene esta cobertura muestra tasas más bajas, los índices se disparan en los inmigrantes recientes, es decir, con hasta 10 años de residencia, en los que 7 de cada diez carece de este Seguro. Los que superan ese periodo, muestran una tasa de carencia de esta cobertura del 45%. Estas cifras se incrementan en el caso de los indocumentados.