El Vaticano también se preocupa la Seguridad Vial, eso, presentó ayer ‘Orientaciones para la pastoral de la carretera’ donde denuncia que el automóvil se ha convertido en un objeto de ostentación y vanidad para suscitar envidia. Invocó la prudencia e hizo público un decálogo del conductor cuyo prer ‘mandamiento’ es ‘no matarás’.
El documento denuncia que a muchas personas cuando conducen les aflora el instinto de dominio, prepotencia y poder y el automóvil lo usan como objeto de ostentación de sí mismos, para eclipsar a los demás y suscitar envidias.
El prero de los mandamientos que promueve el Vaticano, es ‘No matarás’; segundo: ‘La carretera sea para ti un instrumento de comunión entre las personas y no de daño mortal; tercero: ‘Cortesía, corrección y prudencia te ayuden a superar los previstos’; cuarto: ‘Sé caritativo y ayuda al prójo en la necesidad, especialmente si es vícta de un accidente’; y quinto: ‘El automóvil no sea para ti expresión de poder y dominio y ocasión de pecado’.
El sexto ‘mandamiento del automovilista’ es ‘Convence con caridad a los jóvenes y a los que ya no lo son a que no se pongan al volante cuando no están en condiciones de hacerlo’; el sépto: ‘Brinda apoyo a las familias de las víctas de los accidentes’; el octavo: ‘Reúne a la vícta con un automovilista agresor en un momento otuno para que puedan vivir la experiencia liberadora del perdón’. El noveno: ‘En la carretera tutela al más débil’; y déco: ‘Siéntete tú mismo responsable de los demás’.
Según las recomendaciones para los conductores que divulgó ayer el Vaticano, el hecho de adelantar de forma peligrosa un automóvil puede constituir un ‘pecado’ para la Iglesia Católica.
