El Ayuntamiento de Granada ha iniciado la sustitución de pilonas, que cortan el paso de los vehículos en algunos puntos de la ciudad, cámaras de videocontrol con las que vigilará que los conductores cumplan con la no invasión de los espacios destinados al carril bus y taxi o el casco histórico. Las cámaras ya existentes captan cada día unos 300 vehículos.
El Ayuntamiento de Granada ha iniciado la sustitución de pilonas, que cortan el paso de los vehículos en algunos puntos de la ciudad, cámaras de videocontrol con las que vigilará que los conductores cumplan con la no invasión de los espacios destinados al carril bus y taxi. Las cámaras ya existentes captan cada día unos 300 vehículos que se lo saltan a la torera.
Según informa El Ideal de Granada, las obras ya han comenzado en la calle Tablas y continuará en Elvira, Plaza Nueva y Pagés y tendrán una duración cercana a los seis meses. Las cámaras cuentan con tecnología para registrar el paso de los vehículos y sancionar a los que no cumplan con la normativa y pasen junto a ellas.
Las pilonas generan un alto coste de manteniento y un sistema que esté pendiente de abrir y cerrar el paso. Además, pueden causar destrozos en los vehículos que se han saltado la prohibición de circular. Según los responsables de movilidad del ayuntamiento granadino, las cámaras son un sistema más barato y efectivo, sin olvidar el factor recaudatorio y de apoyo a los planes de peatonalización del casco histórico de la ciudad.