La desaparición de Madeleine McCann el 3 de mayo en la región tuguesa de El Algarve ha dado una nueva densión al tratamiento informativo de personas desaparecidas. Gerry y Kate McCann han coordinado una multillonaria campaña mediática alrededor suyo que incluye una web, canales en YouTube, presencia en Second Life y un amplio equipo de Comunicación capitaneado el hasta ahora Director de la Unidad de Seguiento de Medios del gobierno británico, Clarence Mitchell.
El ‘caso Madeleine’ va camino de convertirse en un case study para todo aquél interesado en cómo comunicar de 0 a 100 en un segundo. La desaparición de una niña rubia de tres años, con una perfección en su pupila derecha ha sido elevada para algunos a la altura del trágico accidente que causó la muerte de Diana de Gales hace diez años, a pesar de que desgraciadamente este tipo de incidentes suelen ocurrir mucho más a menudo de lo que pueda parecer.
Desde el comienzo, el proceso fue seguido interés a nivel internacional, un interés que la familia de ‘Maddie’ supo canalizar y mantener con una campaña de Relaciones Públicas perfectamente orquestada en la que participaron personajes públicos como David Beckham, Richard Branson, el papa Benedicto XVI y otros muchos, y en la que no se deja nada al azar, como la agen de Kate McCann sosteniendo el peluche favorito de su hija en cada comparecencia pública.
En poco más de veinte días desde que se notificara la desaparición de la pequeña, la web oficial (www.findmadeleine.com) había rebasado las 100 millones de visitas, al tiempo que comenzaba una campaña de captación de fondos en la que intervienen tanto ataciones personales como venta de productos de merchandising, y que a fecha de hoy lleva recaudadas más de un millón de libras (aproxadamente 1,5 millones de euros). Apariciones en Second Life, un canal propio en YouTube y acuerdos con diversas compañías de trastes para utilizar sus vehículos como sotes publicitarios completan un ‘negocio’ cuyo desenlace es aún una incógnita.
Ahora, los McCann vuelven a la carga con una campaña publicitaria valorada en 117.600 euros, procedentes de donaciones efectuadas al ‘Fondo Madeleine’, utilizados en prensa, televisión y publicidad exterior durante las dos próxas semanas toda Europa, al mismo tiempo que han anunciado la contratación de Clarence Mitchell, ex director de la Unidad de Seguiento de Medios del gobierno británico como nuevo tavoz, en sustitución de Justine McGuinness. Curiosamente, todo ello se produce en un momento en el que las especulaciones de los medios y las sospechas de la policía se cien sobre la propia pareja.
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