CARACAS (31/10/07) La reforma constitucional que está llevando a cabo el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, está provocando más que enfrentamientos. Por un lado están aquellos que apoyan al mandatario y otro, los estudiantes, la Iglesia y opositores que ven en esta reforma unas claras intenciones parte de Chávez de ampliar sus poderes. Y es que, a parte de la reelección ilitada, que ya de sí ha levantado la polémica, el presidente quiere instaurar la censura de los medios en estados de excepción, lo que ha hurgado más en la herida.
Sin duda alguna, la reelección ilitada del presidente y la censura de los medios de comunicación han sido los principales puntos a debatir. Sin embargo, el hecho de que la Asamblea Nacional de Venezuela ya haya aprobado casi unanidad la reforma constitucional, el 25 de octubre de 2007, hace que elinar estas modificaciones de la reforma sea casi posible. A pesar de todo, el próxo 2 de diciembre el texto se someterá a referéndum.
Según el artículo 337, en caso de producirse un estado de excepción, podrán suspender algunas garantías constitucionales, como el derecho a un proceso equitativo o el acceso a la información. De hecho, el artículo 338 señala la posibilidad de decretar el estado de excepción ilitado, sin que obligatoriamente lo tenga que avalar el Tribunal Supremo de Justicia.
Para Reteros sin Fronteras, el artículo 337 modificado así supone ya un revés para las libertades fundamentales en general, y la de la prensa en particular, ya que para la ONG, existen sobrados motivos para preocuparse la articulación entre este artículo y el siguiente, que da poder al Presidente de la República para decretar sí solo el estado de excepción ilitado. Según la jurisprudencia del Tribunal Interamericano de Derechos Humanos, a la que Venezuela debe atenerse en tanto que Estado miembro de la OEA, el estado de urgencia, o de excepción, no puede ser indefinido. Además, el estado de excepción ‘no debe convertirse en una manera cómoda de menoscabar la libertad de prensa, en un país marcado una fuerte polarización mediática'.
La Asamblea tiene que resolver todavía si aprobar los cambios a 69 artículos de la Carta Magna. Según la prensa nacional, solo quedan pendientes de discusión 10 de las 12 disposiciones. Una vez votada se procederá a la sanción en el plenario de la propuesta del mandatario de Venezuela. Tras el visto bueno, pasará al Consejo Nacional Electoral, que tendrá que fijar una fecha con un plazo de 30 días para la convocatoria al refrendo. De hecho, medios como Globovisión o Venezolana de Televisión han sido acusados de haber comenzado a difundir posiciones al respecto.
Una vez que el CNE haga oficial la convocatoria para el referéndum, los bloques a favor y en contra del proyecto podrán activar sus respectivas campañas de propaganda que tendrán como lite hasta 24 horas antes de la consulta.
Muchos sectores son los que acusaron al gobierno de Venezuela, concretamente a su presidente Hugo Chávez, de coartar la libertad de expresión y de prensa en Venezuela, como ha sido el caso de la SIP, especialmente con el cierre de Radio Caracas Televisión y con las advertencias realizadas a Globovisión. Con esta reforma de la Carta Magna y concretamente con estos artículos, se tentaría aún más contra la libertad de prensa.
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