Se trata del proyecto estrella de la administración Bachelet. El sistema de pensiones chileno, un legado de Pinochet que ha sido ‘tado' numerosos países, ha sido objeto de varias reformas que apuntan a una mayor competencia entre las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFPs), para que bajen sus tarifas y no mermen la jubilación de sus afiliados, y la creación de un pilar solidario, donde el Estado asumirá las pensiones de la población con menos ingresos.
Tras su aprobación unáne en el Congreso, el que fuera el prer proyecto de ley enviado el Ejecutivo al Parlamento ha quedado listo para ser promulgado. La iniciativa surgió cuando algunos estudios oficiales señalaban que el sistema no podría garantizar las pensiones mínas a casi la mitad de sus cerca de siete millones de afiliados, en parte que las AFP cobran altas comisiones a sus afiliados (entre un 10 y un 30%), lo que merma la jubilación futura de los cotizantes.
El proyecto original del gobierno incluía la creación de una AFP estatal, una medida que fue rechazada durante la tramitación en el Parlamento, aunque ahora se garantiza una mayor competencia entre las Administradoras de Fondos de Pensiones. La reforma mantiene estas compañías privadas, pero crea un pilar solidario con ataciones estatales que entregará pensiones básicas al 60% de la población de menores ingresos.
El Estado subsidiará también un aumento gradual de las pensiones para aquellos trabajadores de menores ingresos, lo que le permitirá aumentar en casi un 20% el monto de su jubilación, además de entregar incentivos tributarios para el ahorro voluntario de los trabajadores con ingresos medios.
En su prera etapa de plementación, a partir de julio próxo, esa pensión será de unos 125 dólares, que al cabo de un año se incrementará hasta alcanzar los 160 dólares, es decir, casi triplicará el monto actual, que sólo llega a los 60 dólares. El proyecto, que tiene un costo anual de casi 2.000 millones de dólares, beneficiará directamente a más de 800.000 personas, en su mayoría amas de casas, artesanos, taxistas y pequeños comerciantes, que se encuentran fuera del sistema privado.
El sistema chileno, creado en 1981, se caracteriza la instauración de las Administradoras de Fondos de Pensiones, entidades privadas que gestionan el ahorro que mensualmente atan los trabajadores con el objetivo de mantener su nivel de vida en la vejez.
