Alex Grijelmo se está encontrando con algunos rechazos dentro de la Sección Sindical de UGT en EFE. Tanto es así que en su últo boletín, el sindicado le dedican unas líneas de 'lindezas y elogios' las decisiones tomadas últamente con respecto a la nueva sede. Para estos trabajadores las instalaciones no han contentado a nadie y responden a un proyecto personal más que a las verdaderas necesidades de la empresa. 'El presidente Alex Grijelmo ha visto cumplido su sueño al sacar de la chistera un nuevo edificio para la Agencia EFE'. Así expresan los empleados afiliados a UGT en su periódico sindical. En él señalan que la decisión del Presidente responde a un deseo personal y no al bienestar de la empresa.
Los empleados descontentos, aseguran que las instalaciones necesitan una reforma y que no es ni asomo un espacio, tal y como pretendía el Presidente en el que ‘se producirá la prera adaptación del esquema mental de 'rueda' para la redacción integrada'. Una redacción cuya forma de pensar debía ser redonda y no cuadrada, según el presidente, blanco de las iras de sus trabajadores.
Éstos señalan que la nueva sede es inaccesible, está apartada de los autobuses y el Metro y además quedan pendientes distintos trámites jurídicos que todavía pueden condicionar la compra. Pero la pluma de los profesionales de EFE va más allá, y se preguntan si el cambio se realizará finalmente debido a los problemas financieros de la empresa que aún permanece ubicada en calle Julián Camarillo 2224, una empresa en quiebra.
Así las cosas, Grijelmo podría pedirle consejo a Antonio FernándezGaliano de El Mundo sobre cómo contentar a sus redacciones durante el cambio de oficinas.
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