Hace unos días saltó a los medios de comunicación que enfermeras y auxiliares de la Clínica San Rafael de Cádiz habían anunciado su propósito de denunciar a la empresa Pascual (empresa encargada de la gestión de este centro hospitalario y de otros cinco más en Andalucía) si no cambiaban la normativa interna de vestuario del centro, una normativa que, según la presidenta del Comité de Empresa de la clínica, Adela Sastre, les obliga a llevar falda en su jornada laboral y les pide hacer uso de un pantalón que, en opinión de Sastre y sus compañeras de reivindicación, ‘es más higiénico y cómodo‘ que su uniforme habitual.
Ante estas aseveraciones la polémica estaba servida y han surgido multitud de noticias sobre el asunto. PRSalud ha querido hacerse eco de la denuncia pública de estas trabajadoras y ha hablado con sus protagonistas para intentar esclarecer un asunto que ha dado lugar a numerosas interpretaciones.
Todo estalla cuando la empresa Pascual decide reducir de la nómina de las trabajadoras que se niegan a llevar el uniforme (compuesto una bata debajo de la rodilla, un delantal y una cofia, y no una falda, como se ha dicho en la mayoría de los medios de comunicación) un plus de asistencia y dedicación (un plus de productividad) que cobran todos los trabajadores del centro, como medida de amonestación no cumplir con el reglamento del centro. Las enfermeras, indignadas con la medida, dan cuenta de su situación a los medios de comunicación y la Inspección de Trabajo de la Junta de Andalucía decide tomar cartas en el asunto.
Para intentar acercar posturas y solucionar el conflicto, el pasado jueves se reunieron las partes plicadas (de un lado, los miembros de Comisiones Obreras de los comités de empresa de los seis hospitales del grupo Pascual, encabezados su presidenta, Adela Sastre y, de otro, la empresa), en Sevilla pero, según nos cuenta la misma Adela Sastre, ‘la empresa ha adoptado en todo momento una postura obstructiva y no ha cedido a ninguna de nuestras reivindicaciones‘. Asismo, señala también Sastre, ‘tampoco ha habido acuerdo nuestra parte‘.
‘Ahora, reconoce Adela, lo que vamos a hacer es esperar a que lleguen las conclusiones del informe que está elaborando la Inspección de Trabajo y que analiza el tema desde tres frentes: el económico, el de salud laboral y del de igualdad‘. Es decir, la Inspección decidirá si la empresa está actuando de forma sexista o si se están incumpliendo las mínas condiciones higiénicas que debe haber en un centro de trabajo. Dicho informe, nos informa Sastre, llegará a lo largo de la presente semana y, como dice la representante del comité empresarial ‘si el informe de la Junta es negativo, iniciaremos la demanda judicial, que está preparada desde hace tiempo‘. Aunque también reconoce la trabajadora de la clínica de San Rafael que hasta que no aparezca el informe no se puede hacer nada.
Entretanto, los compañeros de Unión General de Trabajadores (UGT) del Comité de Empresa que preside Adela Sastre (CC.OO) han hecho suyo el refrán que dice que ‘a río revuelto, ganancia de pescadores’ y han saltado a la palestra también para dar su versión del asunto.
Según Manuel Campobarde, secretario general de FSPUGT en el Hospital de San Rafael, los miembros de UGT del Comité de Empresa han enviado a diversos medios de comunicación una nota en la que ‘splemente’ quieren sentirse incluidos en las negociaciones que se tengan con la empresa ya que, ‘somos parte de este comité de empresa‘, señala Campobarde, que nos ha contado que sólo piden ‘más información y poder colaborar más en todo este asunto’. De todos modos, todo apunta a que detrás del conflicto inicial hay una batalla sindical encubierta entre los sindicatos mayoritarios.
Así las cosas, y a la espera de que la Junta de Andalucía se pronuncie sobre el asunto, parece ser que en lo único que se han puesto de acuerdo los representantes de UGT y CC.OO es en reconocer que algunos medios de comunicación han utilizado el tema de forma poco seria e incluso alguno que otro ha frivolizado con el tema lo que, tanto para Sastre como para Campobarde, ‘hace daño a la agen de nuestro centro y nuestra profesión‘.
Seguiremos informando…