LA HABANA (18/04/08) Según señala el tal Americaeconomica.com, el ex presidente Fidel Castro acaba de demostrar su condición de centinelade su revolución al criticar moderadamente a un periodista local al que aconsejó ‘tener mucho cuidado con todo lo que se afirma, para no seguir el juego a la ideología enemiga'.
En la ‘reflexión' titulada ‘No hacer concesiones a la ideología enemiga', Castro asegura haber escuchado ‘un comentario público divulgado un medio masivo de la Revolución, que no voy a mencionar concretamente' para señalar más adelante que ‘mediten bien lo que dicen, lo que se afirma, para no hacer concesiones vergonzosas'.
Dado el singular momento de cambios que vive la isla bajo el gobierno de su hermano Raúl Castro, y en medio de un peculiar proceso de debates como nunca antes, no faltaron tanto dentro como fuera de Cuba los que han intentado colocar esa pieza del rompecabezas en el presunto autor que condujo al líder a esa respuesta.
Algunos han pensado que se trata de unas declaraciones formuladas Orlando Lugo Fonte, presidente de la Asociación Nacional de Agricultores Pequeños (ANAP), cuando en el informativo estelar de la noche afirmó que en Cuba ‘se harán todos los cambios que sean precisos'.
Sin embargo, la gran mayoría atribuye el enfado de Fidel al artículo del periodista Luis Sexto, del diario Juventud Rebelde, perteneciente a la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC) que bajo el título de ‘La marcha atrás no va palante' cuestiona muy seriamente a las controvertidas ‘concesiones'.
‘Muchos' dice Sexto ‘podríamos compartir una experiencia común: Tanto hoy como ayer oíamos decir que tenemos que hacer concesiones… Querían decir, ejemplo, que si hubo que establecer legalmente el trabajo cuenta propia era que la vida nos obliga a retroceder, a hacer una concesión'.
‘¿Concesión respecto a qué?' se pregunta Sexto para responderse a sí mismo, ‘Concesión respecto a lo que deseamos y queremos'. Cuando las autoridades cubanas se refieren a ‘concesiones' éstas son enmarcadas en el llamado Período Especial, que comenzó con la desaparición de la Unión Soviética y sumió a la isla en una de las peores crisis económicas de su historia.
Finalmente, Luis Sexto vuelve a preguntarse: ‘¿Es una ‘concesión', un retroceso, concebir, organizar fórmulas que permitan el progreso en obras concretas y no en sueños?'. Con estas palabras, muy probablemente haya sido Sexto quien llevara al comandante Fidel Castro a recordarle ‘no hacerle el juego al enemigo'.
