Ayer asistí en el centro comercial ‘El Carralero', en la maravillosa ciudad madrileña de Las Rozas, donde gobierna el bueno de Bonifacio de Santiago, que como Esperanza Aguirre, gana y gana y vuelve a ganar… Y me dirigí al gran centro del ocio, el entreteniento y el dete. He de confesar que no practico ninguno, aunque tenga disfraces para casi todos, ya se sabe que a la fuerza ahorcan…
Y me disponía a salir cuando veo una escena que me resultó chocante y me reconfirmaba más en mi creencia de que si lo compras en ‘El Corte Inglés' nunca tendrás problemas, en el resto…
La situación
Un niño, de no más de 10 años, junto a su padre y a una adolescente. Habían realizado una compra, y uno de los productos (como cientos o miles en este centro), estaban sin etiquetar, y no es culpa de los trabajadores, es que no hay posibilidad de encontrarlos, son uno cada ‘cien pasillos'. El padre hablaba al niño intentando tranquilizarlo, que lo que no tenía precio era el artículo él elegido. ‘No te preocupes que ya verás como estos señores nos lo resuelven'… Al rato, me quedé tomando una botella de agua para no perderme el sucedido. Y los señores de DECATHLON dicen ‘no pasa nada, que ahora mismo le decos lo que cuesta'… Y en la cara del niño de ojos grandes, negros y sorprendidos, empieza a asomar una lágra, que él lo que quería no tiene precio. El padre (al menos tenía cara de ello la resignación), pide que le entreguen una ‘hoja de reclamaciones' a lo que el empleado de DECATHLON contesta: ‘Sin problema'. Y añade: ‘La verdad es que las hojas de reclamaciones no sirven para nada, es mejor que haga un escrito al centro para que podamos mejorar'… El padre les conmina a que le entreguen la hoja de reclamaciones y de nuevo el empleado le dice que el Ayuntamiento de Las Rozas no hace nada en su concejalía de consumo, con este tipo de documentos y que además si los precios se han caído, será culpa de…
Por supuesto que es obligatorio entregar la ‘hoja de reclamaciones', su puesto que el Ayuntamiento de Las Rozas hará algo con esa queja, que entre otras la Ley de Consumidores dice que tiene que estar todo (TODO), perfectamente etiquetado y con los descuentos sobre los precios anteriores. El padre no sabía que decir, había defraudado a su pequeño, y enca el señor del DECATHLON, no les daba solución, ni precio al artículo… Cuando la situación era de lo más rocambolesca, esperé a que el padre se detuviese a mi lado para comprar una botella de agua y le comenté: ‘Por qué no prueba usted con BOOMERANG, seguro que ellos no le defraudarán'. Parece una publicidad gratuita, pero es una realidad palmaria y demostrable. ‘Si no lo tenemos lo buscamos. Y si no queda satisfecho le devolvemos el dinero'. ¿Para qué están las leyes de defensa de los consumidores?
Pedro Aparicio Pérez
DIRECTOR DE PRNOTICIAS.COM
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