EXCLUSIVA PR. Hace un par meses Julio Ariza y su equipo se plantearon seriamente la posibilidad de cerrar gradualmente sus publicaciones presas, medios que hace tiempo que no son rentables y que restan protagonismo al proyecto audiovisual del Grupo. Y es que mientras Época sigue en pérdidas, Alba se mantiene al día y sus publicaciones de Comunicación interna no cuajan, del otro lado tienen una Radio con muchos proyectos en marcha, un canal en TDT nacional y una serie de frecuencias locales. Finalmente la balanza se decantó del lado del papel ¿Cómo? Os lo cuenta prnoticias.
Julio Ariza es consciente de que el futuro del Grupo está en el área audiovisual. Hace unos meses os contábamos que el presidente de Intereconomía estaba construyendo unos ponentes estudios en la entreplanta de su edificio corativo en el Paseo de la Castellana, precisamente para aumentar la producción propia de sus espacios televisivos e incluso para en un mediano plazo apostar la producción externa de formatos para otras teles locales.
Dirigido Xavier Horcajo, el proyecto ha pasado de ser una Radio económica con poca audiencia, a ser un canal nacional en TDT que competirá con las grandes cadenas generalistas a partir del 2010. En medio han puesto en marcha una serie de canales regionales y temáticos y preparan tantes acuerdos para abrir espacios generalistas en su emisora. Las informaciones llegadas hasta prnoticias en rigurosa exclusiva incluso hablan de un acuerdo con un tante club de fútbol para abrir una radio detiva en el corto plazo.
Con este panorama, Ariza ha interpretado que los medios presos han comenzado a convertirse en un lastre. Y no está equivocado. La revista Época sigue en pérdidas, la publicación religiosa ALBA genera lo justo para mantenerse con vida y las publicaciones corativas no terminan de cuajar. La idea era soltar amarras y quedarse con el músculo de la empresa (citando las célebres palabras de Jae Castellanos), no obstante, el vicepresidente del Grupo PedroJuan Viladrich, convenció a Ariza que se debía mantener el papel.
¿Por qué? Según fuentes cercanas al Grupo que los considera ‘como un elemento para crear opinión y difundir las ideas del grupo'. Precisamente una de las grandes obsesiones de Ariza es influir y marcar la pauta de la agenda política conservadora, de momento, sin mucho éxito. ¿Sin papel no hay influencia? Así lo cree Ariza que está dispuesto a mantener sus publicaciones presas ahora. ¿Hasta cuándo?
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