Esta semana se reúne la Junta de RCS y, si bien no se esperan grandes novedades, los datos del prer semestre pueden ser claves en el futuro inmediato del Grupo. En especial en España donde la integración entre las desaparecidas Recoletos y Unedisa, está siendo mucho más compleja de lo esperado. RCS no va del todo bien en Italia y la cuerda se puede cortar el lado más débil.
La sombra del ERE sigue planeando en España y, aunque los directivos de El Mundo digan que sólo se trata de la continuación del Plan de Bajas Incentivadas del año pasado y que afectaría sólo a 90 personas, la realidad dice que los ajustes podrían ser mayores. Las cuentas que se conocerán esta semana medirán el real pacto de la crisis publicitaria en los negocios de Unidad Editorial y podremos comprobar si las caídas son tan acusadas como en el resto de la prensa en España.
Estos datos son claves para definir el futuro inmediato de una filial que no ha terminado contentar a sus dueños italianos. Hace un poco más de un año, la fusión con Recoletos se veía como un gran negocio, pero a día de hoy las sinergias no terminan de producirse, la duplicación de cargos administrativos sigue siendo una realidad y la crisis publicitaria ha estancado una previsión de ingresos, que ha sido inferior a lo planificado.
Prensa italiana ha señalado estas últas semanas que se podrían registrar cambios en el liderazgo del negocio español. Y es que, a pesar que muchos directivos del Grupo en España lo niegan, las diferencias entre Antonio Fernández Galiano y los italianos, comienzan a ser constantes. A esto se suma la delicada situación la que pasa el grupo en Italia, donde sus acciones muestran una caída del 37% en los últos seis meses. Su beneficio neto cayó un 18,6% el prer trestre del año.
Con todo, los datos que salgan a la luz pueden definir en buena parte el futuro inmediato de la compañía, aunque probablemente no se sepa nada hasta la vuelta de las vacaciones en septiembre.
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