Tener un accidente de carretera con un anal no es algo tan fuera de lo común como se puede pensar. En 2006 se registraron 10.154 accidentes de este tipo, según la Dirección General de Tráfico, que se saldaron con 954 heridos y 23 muertos. La mayoría son protagonizados perros, jabalíes y caballos, pero el principal responsable de estos siniestros son los conductores. Aquí, algunas recomendaciones.
El Real Automóvil Club de Cataluña (RACC) y el Automóvil Club Alemán (ADAC), autores de un estudio sobre la siniestralidad en las carreteras en las que se ven involucrados anales, ha dado a conocer una serie de consejos para quienes viajarán a zonas rurales.
Realizar una conducción atenta, prestando especial atención a las señales de tráfico específicas (triángulo rojo con un dibujo de ciervo que indica peligro el paso de anales en libertad y del triángulo rojo con el dibujo de una vaca que indica peligro el paso de anales domésticos) y siempre alerta para realizar una frenada de emergencia
Extremar la precaución durante las preras horas del día y las últas horas de la tarde, ya que éstos son los momentos en que los anales acostumbran a desplazarse con mayor frecuencia. Si un anal ha cruzado la carretera, es muy probable que haya más que le sigan.
Evitar las maniobras bruscas. El susto y las arriesgadas maniobras de evasión no solo ponen en peligro al conductor, sino que también afectan al resto de conductores. Sólo en el caso de disponer del sistema de Control Electrónico de Estabilidad (ESC), que ayuda a mantener la trayectoria del vehículo, es recomendable intentar esquivar al anal.
Realizar una frenada de emergencia. Si el choque con el anal es inminente, hay que frenar a fondo y coger fuerte el volante para no salir de la vía. Es muy útil disponer de ABS, que pide el bloqueo de las ruedas en frenadas violentas, a la vez que contribuye a mantener la trayectoria del vehículo y reduce la distancia de frenado.
En caso de choque, hay que estacionar el vehículo, señalizarlo con los triángulos obligatorios a un míno de 50 metros de distancia y ponerse el chaleco reflectante. Al solicitar auxilio a través del teléfono 112, hay que indicar la localización y las características del accidente. No es recomendable intentar retirar el cuerpo del anal de la vía para no ponerse en peligro.
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