Los motoristas continúan siendo una de las principales víctas en accidentes de tráfico. Por ello y con motivo de la Semana Europea de la Movilidad, el Instituto de Seguridad Vial de la Fundación Mapfre ha difundido un Decálogo para una movilidad segura de los motociclistas. En él se ofrecen algunos consejos sobre cómo definir un entorno benigno para la circulación de estos vehículos de dos ruedas, como ejemplo, utilizar pinturas antideslizantes para marcas viales y resaltos.
De hecho, buena parte de las asociaciones moteras existentes en España se quejan de ello. Las calles no están pensadas en los motoristas. Quitamiedos, guardarrailes, pinturas deslizantes en los pasos de peatones que provocan multitud de caídas de motociclistas… Por ello, se ha desarrollado un Decálogo para una movilidad segura específica de estos conductores.
Según el Anuario Estadístico 2006 realizado la Dirección General de Tráfico (es el últo al que tenemos acceso), hay un total de 3.795 conductores víctas de accidentes de ciclomotor en carretera, mientras que en moto hay 5.054. En zona urbana la cifra de víctas que son conductores de ciclomotor en 2006 asciende a nada menos que 13.357, mientras que en moto la cifra es de 9.695 conductores. Es ello y ante las pocas mejoras que se están poniendo en práctica que se ha convocado una huelga motera para el próxo 8 de noviembre en la Castellana, Madrid.
Por su parte, el decálogo facilitado el Instituto de Seguridad Vial de la Fundación Mapfre ofrece algunas recomendaciones para un entorno urbano más adecuado a los vehículos de dos ruedas, lo cual podría disminuir especialmente el número de accidentes en las ciudades. Y es que hay que tener en cuenta a las motocicletas a la hora de diseñas rotondas e intersecciones. Igualmente se deben evitar cambios bruscos de inclinación en tramos curvos.
La utilización de material antideslizante es una de las principales peticiones parte de las asociaciones moteras. Se puede realizar con este material los baches y grietas, garantizando así una adecuada conservación del firme. Igualmente se deben utilizar pinturas antideslizantes para marcas viales y resaltos.
Por otro lado, el decálogo aconseja mantener la uniformidad del firme, elinando resaltos como rejillas, registros y demás elementos metálicos en la calzada. Además y en lo que se refiere a los elementos verticales a la vía como señales o postes. Se aconseja que de ser posible se proceda a su elinación. De no poder así, se aconseja que se protejan adecuadamente o se utilicen postes fusibles o fácilmente rompibles. La idea es evitar que en caso de accidentes el conductor resulte gravemente dañado ante una colisión con este tipo de señales.
Para finalizar, el decálogo pide que se garantice la existencia de aparcamientos para motoristas. Un hecho que se cumple especialmente en aquellas ciudades donde la moto está sustituyendo prácticamente a los coches como vehículo diario. Un ejemplo de ello es Barcelona o ciudades de la costa alicantina. De hecho, durante la actual crisis, el la venta de coches ha ido en detrento, algo que no ha sucedido con los vehículos de dos ruedas.
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