Las mujeres que han tenido que pasar el quirófano tras sufrir un cáncer de mama pueden llegar a sufrir tantes secuelas físicas y psicológicas si no se someten a una reconstrucción inmediata. Así, una vez superada la cirugía, la quioterapia y la radioterapia, el últo paso que pone fin a este duro proceso es la reconstrucción del pecho.
Este centro interviene a las Pacientes que llegan desde distintos hospitales donde, tras someterse al tratamiento propio para vencer este tumor, no han podido ser operadas. Cuando la reconstrucción mamaria no se ha realizado junto con la extracción del tumor, queda la posibilidad de realizar una reconstrucción diferida.
El director médico de la Clínica Menorca Ángel Martín explica que, en este caso, existen dos tipos de tratamiento: la reconstrucción completa de la mama o splemente de uno de sus cuadrantes, en el caso de que no se haya extirpado completo. Éste últo caso es el más sencillo ya que el procediento es el mismo que el del aumento de pecho. Splemente se debe colocar 'una prótesis más grande en la mama afectada' y una 'más pequeña en la contralateral'. En el caso de que sea una reconstrucción completa se debe desarrollar en dos etapas ya que la piel se encuentra muy debilitada. En la prera cirugía la piel da de sí y en la segunda se colocan las prótesis. Además, se reconstruye la aureolapezón y se coloca la contralateral, que estará más caída.
La Paciente debe esperar entre una y otra cirugía alrededor de seis meses, el mismo tiempo que se debe dejar tras la cirugía del cáncer para realizarse estas dos operaciones. El técnico en micro pigmentación, Julián Hernando, señala que en cirugía se reconstruye un falso pezón mientras que la coloración de la aureola se consigue con micro pigmentación. Esta reconstrucción, indolora y sin efectos secundarios, se puede realizar a los dos o tres meses tras la últa cirugía.