La inversión en seguros no es un coste fijo, sino que puede gestionarse de forma más eficaz para el negocio, de forma que la compañía en cuestión mejore su liquidez, libere efectivo, fortalezca su resistencia financiera y continúe operando de forma rentable en una coyuntura económica en deterioro. Así lo afirma un estudio de la consultora de riesgos y seguros Marsh, que da una serie de consejos.
En el informe ‘Improving Working Capital and Business Resilience', Marsh explica que reduciendo el coste de sus riesgos y seguros, gestionando los cambiantes factores de riesgo permite la obtención de efectivo que se puede reinvertir en el negocio.
‘Además, los seguros también pueden usarse como una medida de seguridad adicional, ya sea para reducir el coste de un préstamo, allanar el camino para obtener otro mayor, o como solución para sacar un pasivo del balance', Luis Docio, director de Riesgos de Crédito de Marsh.
Una de las recomendaciones de la entidad es revisar la cantidad de riesgo que están reteniendo y cuántos seguros están comprando, teniendo en cuenta las pérdidas probables tipo de negocio y la cultura de retención de riesgos de su organización. Así se podría liberar capital circulante que de otro modo estaría inevitablemente atado al seguro, garantizando al mismo tiempo una adecuada protección.
Por otro lado, conviene maxizar el valor del seguro de crédito, que ofrece protección frente al riesgo cada vez mayor de pago. Mediante la asignación de la póliza a una entidad financiera, las cuentas pendientes de cobro representarán un activo más aceptable, o servirán para obtener un préstamo mayor o para reducir el coste del mismo. Si a ello se suma el pago de las pras del seguro a plazos, las empresas podrán liberar efectivo para usarlo en otras operaciones.
También se aconseja considerar otras formas de aseguramiento, ya que las soluciones aseguradoras o la renegociación de los contratos pueden mitigar o transferir el riesgo de forma total o parcial y, potencialmente, ayudar a liberar capital circulante. Además, los avales de ejecución también pueden liberar la capacidad de crédito.
Por últo, la capacidad de adaptación del negocio será una pieza clave ante las volátiles condiciones económicas pueden cambiar las zonas y niveles de riesgo rápidamente; de hecho, ahora las empresas pueden estar más expuestas a riesgos que antes no les preocupaban. Marsh recomienda que las empresas revisen su nivel de exposición al riesgo, evalúen su pacto potencial en el negocio y pongan en marcha sólidos Planes de Contingencia.
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