El año 2008 que estamos a punto de cerrar ha tenido un objetivo claro para el Ministerio de Sanidad y Consumo dirigido Bernat Soria que no es otro que conseguir el Gran Pacto la Sanidad en el que colaborarán estrechamente las Comunidades Autónomas y el Sistema Nacional de Salud para mantener la posición que coloca a la sanidad española entre una de las mejores del mundo (hasta la candidata Hillary Clinton visitó uno de nuestros hospitales).
Ya en vísperas de las elecciones generales quedamos asombrados con el anuncio ministerial de una atención bucodental gratuita para los más pequeños, un anuncio que parece no haber dado sus frutos hasta el lanzamiento, hace tan sólo unos días, de la campaña creada la agencia de publicidad gallega Bap & Conde ‘Que molen tus muelas'.
Curiosamente ésta ha sido la agencia que también ha llevado a cabo a finales de año la controvertida campaña puesta en marcha el Ministerio que busca prevenir los embarazos no deseados a ritmo de hip hop y con el lema ‘Yo pongo condón' y que a pesar del escepticismo entre el público objetivo el vídeo ha conseguido situarse entre los más vistos en ‘Youtube' a nivel mundial.
Una vez pasada la tormenta de las elecciones generales, y con Bernat Soria repitiendo una legislatura más en el Ministerio de Sanidad, la sociedad española recordaba la tragedia del aceite de colza debido a unas partidas contaminadas de aceite de girasol de origen ucraniano que llegaron a los mercados españoles. Pero el agua no llegó al río que desde el gabinete de comunicación del ministro se capeó bastante bien el temal sin generar situaciones de pánico entre los ciudadanos.
De cara al verano Bernat y sus chicos nos volvían a recordar la tancia de permanecer en lugares frescos y combatir las elevadísas temperaturas a base de mucho ‘líquido elemento' con una original campaña a base de sombras chinescas que firmaba Globalhealthcare y que tenía como lema ‘Combatir el calor está en tus manos'.
Terminamos el año con los preservativos a cuestas y fomentando la práctica segura de sexo en todo el abanico de opciones sexuales pero además desde el Paseo del Prado nos han recordado también la tancia de los trasplantes de órganos con un corto promocional dirigido a la población inmigrante en España.
Hasta aquí lo más reseñable (aunque no lo único) de la actividad ministerial en 2008. En resumen, un año sin sorpresas, sin salidas de tono, sin nada destacable salvo lo obvio y es que Bernat Soria, si peca de algo, es de ser tan políticamente correcto que ejerce como un ministro hermético pero al que no se le puede pillar en un renuncio. Esperemos que el próxo año desde el Ministerio de Sanidad lleguen más (y más variadas) noticias para gozo y regocijo de los periodistas del sector.
