El futuro es ecológico y los gestores de flotas de pymes y grandes empresas internacionales lo saben. De hecho, un 6% de estas compañías plantadas en España aseguran que incorarán coches eléctricos a sus flotas en los próxos dos años.
Sin embargo, este no será el único motivo. Y es que, además de contaminar menos, se amortiguan los costes derivados del carburante sobre la cuenta de resultados, según revela El Observador del Vehículo de Empresa (CVO) promovido Arval, compañía francesa especializada en renting perteneciente al grupo BNP Paribas.
El estudio (realizado entre más de 4.000 gestores de flotas de pymes y grandes empresas en diez países) pone de manifiesto la preocupación creciente de estas compañías orientar sus políticas de gestión de flotas hacia criterios medioambientales, sumándose además a los últos ‘movientos' a favor del vehículo eléctrico.
Si algo se destaca este estudio es el hecho de que serán precisamente las pequeñas y medianas empresas donde el 6% asegura que renovará sus vehículos con eléctricos en los próxos dos años, frente al 4% de las grandes compañías que parecen apostar en mayor medida los vehículos con etiquetaje de bajo consumo.
De esta forma, más de la cuarta parte de las empresas españolas utilizará en 2010 vehículos de consumo eficiente (Eco2, Econetic, Bluetec, etc.), mientras que sólo un 4% incorará vehículos híbridos. Alrededor del 10% de las empresas empleará vehículos con combustibles alternativos como etanol o gas natural.
Hoy hoy, cinco de cada diez compañías plantadas en España, principalmente grandes empresas, selecciona sus flotas de acuerdo a criterios medioambientales, llevando un control puntual de las emisiones de CO2 que arrojan a la atmósfera con el objetivo adicional de controlar sus costes.
Por otro lado, el estudio de Arval revela que buena parte de las empresas estaría dispuesta a incorar ‘vehículos verdes' a sus flotas si viera respaldado su uso con iniciativas tangibles. Así, alrededor de las tres cuartas partes de los gestores reconocen que su motivación aumentaría si contaran con incentivos fiscales atractivos, una garantía del fabricante más duradera y una información técnica y de coste de uso de estos vehículos más completa.