La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha iniciado una campaña mundial con el objetivo de mejorar la información y sensibilización acerca de la epilepsia.
El organismo supranacional reconoce que la epilepsia es un tante problema de salud pública y eso, con el apoyo de la Liga Internacional contra la Epilepsia y la Oficina Internacional para la Epilepsia ha puesto en marcha esta iniciativa.
Mediante esta acción la OMS no sólo pretende sensibilizar a la población sino que además desea fortalecer las medidas públicas y privadas para mejorar la atención y reducir el pacto de la enfermedad.
En el mundo aproxadamente existen 50 millones de personas con epilepsia. Se esta que la incidencia en países en desarrollo se encuentra en 6 a 10 casos 1.000, mientras que en los países desarrollados la aparición de nuevos casos en la población general oscila entre 40 y 70 100.000.
Esta enfermedad tiene tantes repercusiones económicas desde el punto de vista de la necesidad de atención sanitaria, la mortalidad prematura y la pérdida de productividad laboral. Además, entre otras litaciones, las personas con epilepsia ven reducido su acceso a los seguros de vida y de enfermedad, y tienen dificultades para obtener el permiso de conducir u ocupar determinados puestos de trabajo.
Lo novedoso es que estudios recientes realizados en países desarrollados y en desarrollo han revelado que el tratamiento con medicamentos antiepilépticos puede tener éxito hasta en un 70 ciento de los adultos y niños recién diagnosticados de epilepsia. Sin embargo, el éxito de los tratamientos no se produce del mismo modo en los países en desarrollo, donde tres cuartas partes de los pacientes con epilepsia pueden no recibir el tratamiento que necesitan. Este centaje aumenta en África donde aproxadamente 9 de cada 10 personas con epilepsia no reciben tratamiento, lo que pone de manifiesto que aún queda mucho hacer respecto a esta patología.