Se acerca una nueva edición de Eurovisión y pocos nos hemos dado cuenta de ello. Este año las votaciones se están haciendo segundo año consecutivo a través de la página de RTVE, y según la misma ya se acumulan tres millones de votos en total. No obstante, el concurso ha pasado sin pena ni gloria los medios, una situación radicalmente distinta a la vivida hace un año cuando Rodolfo Chikilicuatre el candidato de Buenafuente reventaba todas las audiencias.
Hace exactamente un año, España vivía la Chikilicuatremanía, un fenómeno popular en que el personaje de Buenafuente Rodolfo Chikilicuatre arrasaba en las votaciones de Eurovisión y finalmente se hacía con la nominación para representar a España en el concurso continental. Había de todo: pegatinas, politonos, juegos en el móvil y hasta un juego de la ONCE patrocinado el Chiki Chiki. Un fenómeno que se saldó con un éxito mediático sin precedentes, pero en que la posición de Chikilicuatre no fue más allá de la déca posición.
Este éxito sin precedentes (sólo en España que en europa la canción tuvo un éxito relativo) se lo debe TVE a Buenafuente y a La Sexta, que crearon este personaje y lo presentaron como candidato a Eurovisión en la pública. La cadena propuso que el público votara al representante de nuestro país, que eligió en masa a Chikilicuatre, demostrando que el festival estaba dispuesto a aceptar parodias que poco tenían que ver con la canción. Aunque gracias a esta gracieta de Buenafuente casi 14 millones de personas estuvieron atentos a la actuación del Chikilicuatre en Eurovisión.
Este año la cadena repite la fórmula de votación parte del público. Hasta ahora tres millones de personas se han acercado a la página de RTVE para elegir a su favorito. De momento la lista la encabeza Melody, con 109.200 votos seguida muy de cerca la triunfita Soraya, con 109.703 votos. Este año además, se elige al jurado también desde la página. No obstante, la repercusión mediática ha sido prácticamente inexistente. Pocos saben cuáles son los participantes este año y nadie se ha hecho eco de unas votaciones que se cierran esta misma semana. Parece que sin Chiki Chiki, o sin algún friki que la sustituya, es poco lo que se puede hacer para intentar resucitar un formato, que año a año se desangra y que en cinco años, sólo ha logrado resucitar, el único que nada tenía que ver con la música: Rodolfo Chikilicuatre.
UN POCO DE HISTORIA. El festival de Eurovisión ha protagonizado grandes momentos en la historia de España. Cómo olvidar aquel La la la de Massiel que levantó el autoesta de un pueblo en 1968, y el Vivo cantando de Salomé, que se alzó con el premio al año siguiente cuando prera y única vez el festival se celebró en España. Después de esto, pese a que ganar el festival se antojara posible, España llevaba cantantes de la talla de Julio Iglesias y Segio Dalma para representar la canción de nuestro país. También han pasado el certamen cantantes jóvenes que buscaban hacerse un hueco en la música.
El hecho es que con los años la audiencia perdía el interés en este concurso europeo, hasta que llegaron los triunfitos y nos hicieron creer que podíamos ganar. Los espectadores estuvieron muy pendientes de Rosa y sus coristas de excepción (entre los que estaba el ahora artista internacional David Bisbal). Pero el interés ya no residía en Eurovisión, sino en el fenómeno mediático en el que se convirtieron estos artistas nacidos en Operación Triunfo. Rosa no ganó, pero TVE sí. El certamen fue seguido 12.775.000 espectadores, además, las galas que se organizaron para elegir al ganador le dieron el liderazgo a la pública cada lunes. Este éxito no se repitió con Beth, que aunque le dio más tirón al certamen que de costumbre (la siguieron 8.790.000 espectadores) no repitió el fenómeno de Rosa, ya que OT se había desinflado.
Salvo estas excepciones, el seguiento del festival ha sido bastante más modesto: el grupo D'Nash tuvo una audiencia de 3.373.000 espectadores en 2007, Las Ketchup 4.892.000 en 2006, Son de sol 4.712.000 en 2005 y Ramón 6.826.000 en 2004.
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