El móvil con el sistema operativo Android, desarrollado Google, saldrá al mercado español el próxo mes de marzo. Por eso de que quien da prero da dos veces, Telefónica anunció ayer su lanzamiento para ese mes, a un precio de cero a 199 euros, según los compromisos de voz y datos contratados. El operador mostrará el famoso teléfono en el Mobile World Congress que se celebrará en Barcelona durante toda la semana que viene, pero no será el único móvil de Google que se mostrará en la multitudinaria feria. El móvil de Google lo hace el fabricante HTC bajo la nombre Dream, y ya se sabe que en la feria habrá otros móviles con el sistema operativo de Google, al menos uno también estará fabricado HTC, y parece que será comercializado otro operador en España.
El llamado móvil de Google es una de las próxas revoluciones del mundo móvil. El acceso a Intet para consumir datos es la única vía de creciento que tiene el mundo móvil en medio de la crisis, y todos luchan competir. El móvil de Google tiene todas las facilidades del gigantesco buscador de Intet. Iguala la navegación Intet a la del PC, facilita el correo electrónico, y añade las aplicaciones más populares de Google, como YouTube, Google Maps y Gmail. Operadores de Estados Unidos y de Alemania ya comercializan el teléfono, y los analistas lo comparan con el iPhone de Apple especulando cual de los dos es mejor para navegar Intet.
Detrás de esta guerra de teléfonos hay una de estándares. Google es uno de los 47 miembros de la Open Handset Alliance, entre los que se encuentran los mayores operadores de todo el mundo, también Telefónica y Vodafone, y casi todos los fabricantes de telecomunicaciones, electrónica, semiconductores y de móviles, con casi la única excepción del gigante Nokia, Apple y Blackberry. Android es el sistema operativo promovido la Open Handset para generalizarlo como el estándar mundial de los móviles. Igual objetivo persigue la Fundación LiMo (Linux Mobile Foundation), a la que pertenecen otro nutrido grupo de fabricantes y operado
El Mercado móvil está valorado en 700 millones de dólares y se espera que llegue a los 3.000 millones en 2012. La lucha los sistemas operativos y las aplicaciones será bestial, y arrastrará a algunos de los grandes nombres, igual que sucedió con otras guerras de estándares, como las del vídeo, los discos ópticos, los DVD,s y los videojuegos.
SUSANA BLÁZQUEZ
PERIODISTA
