prexclusivo Cuesta pensar que no hace más de diez años la firma italiana del tridente era considerada en Estados Unidos como una marca paria debido a los problemas derivados del Biturbo y el Chrysler TC, en el que también tomó parte. Estos errores están parcialmente perdonados y, si nos apuran, prácticamente olvidados.
La marca ha vuelto a la ofensiva con el escandalosamente bello Maserati GranTurismo un coupé recientemente añadido a la berlina Quattrote en los concesionarios de la firma. La gama, de momento, termina ahí. Bendecido la mecánica V8 de 405 CV de aquel, como es sabido de origen Ferrari, el GranTurismo 126.000 euros está repleto de tecnología y soluciones de la firma del ‘cavallino' para rematar un incondicional atractivo nacido de los lápices del genial Pininfarina.
La personalización continúa siendo uno de los sellos en la marca, y de ahí que el GranTurismo esté disponible en multitud de tonalidades internas y externas. Y eso que el equipo de audionavegación es común a modelos más populares… Pero no es un baby Ferrari, sino un súper detivo con mayúsculas y entidad propia, heredero de la mejor tradición de la marca. Es, en cualquier caso, genuino y especial, como el A6 1500 Coupé de 1947, su inspirador estético.
Lo suyo son los grandes espacios abiertos, entornos donde despliega sus mejores atributos como vehículo ideado para devorar kilómetros sin penalizar el confort. Sin embargo, cuando la idea es adentrarse trazados repletos de curvas el GranTurismo no se amilana, pues pese a sus notables envergadura y distancia entre ejes goza de un cuadro de suspensiones inspirado en el mundo de la competición dotado de un mecanismo de firmeza variable llamado Skyhook.
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