Siguen cumpliéndose las previsiones, los tipos de interés del Banco Central Europeo bajaron ayer al 1,5%, desde el 2% anterior, y los mercados esperan que para el verano, estarán al 1%. La razón de poner el dinero tan barato es mala y buena. Lo explicó ayer el presidente del BCE, Trichet, "la recesión en Europa es más fuerte de lo esperado y sigue la caída de la inflación, que está en el 1,1%". La bajada de los tipos a casi cero nos llevará camino de una recesión a la japonesa, que duró nueve años. Junto a esta mala noticia, Trichet sumó esperanza, al decir que el año que viene se verá luz al final del túnel y habrá una ligera recuperación de la economía, con un creciento del 0,7% en Europa. Por fin un poco de esperanza.
El BCE ya ha salido de la lucha contra la inflación, que fue el principal objetivo de su naciento. Ha tardado muchos meses en aceptar que debe salvar la economía europea de esta crisis como sea. La recesión europea puede llegar a una caída del 2% al 3,2% en este año, según Trichet, y si esto sucede se seguirán bajando los tipos, que es la única artillería que le queda al banco para combatir la situación. Vamos camino de los estadounidenses y los británicos, que tienen sus tipos al 0,5%, que su recesión es más fuerte que la europea.
La caída de tipos es una buena noticia para los hipotecados, aunque para los mercados es el certificado de que la economía no reacciona. La confianza no termina de llegar. De hecho, el 80% de las empresas siguen diciendo que no reciben crédito, pese a que el dinero está tirado de precio. En esas condiciones ¿qué confianza pueden tener? El euríbor sigue bajando, ahora está en el 1,98, el nivel de abril de 2004, y eso es otra buena noticia. Pero los bancos ponen la hipoteca entre un 0,75 y un 1,25% enca del euríbor, y algunos llegan al 5%. No se cortan un pelo.
La opinión pública sigue sin entender que pasa, qué no vuelve la confianza. Es fácil: las Bolsas siguen bajando, sigue creciendo el paro, con esos dos factores negativos no hay manera de devolver el optismo a la economía. Los analistas y los gobiernos lo saben. Ya dijo Galbraith, el famoso economista que escribió sobre la crisis del 29, que la "confianza desaparece en días, y tarda en volver años". En el 29 fueron nueve años de recesión, esta vez se está poniendo mucha artillería para combatir la crisis, esperemos que esto dure meses, lo que dice Trichet.
MIGUEL CIFUENTES
PERIODISTA
