La presencia de la anemia en los pacientes con cáncer está estrechamente relacionada con la quioterapia, pero en la mayoría de los casos no es tratada, según un estudio realizado la asociación Onvida, que prepara otro para conocer las necesidades de estos enfermos.
‘Spanish Lung Cancer Anemia Survey' es el nombre de esta encuesta realizada el Proyecto Onvida, constituida como asociación desde hace unos meses e pulsada oncólogos españoles preocupados mejorar la calidad de vida de los pacientes. Según este estudio, el 56 ciento de los pacientes con cáncer de pulmón tienen anemia.
De éstos, el 58 ciento de los pacientes tratados con quioterapia desarrollan esta patología frente al 39 ciento de los que la presentan, tratados con otros medios. Sin embargo, el estudio también demuestra que el 53 ciento de los pacientes oncológicos con anemia no reciben tratamiento para esta últa ya que no considera que presente síntomas de bajos niveles de hemoglobina.
En este sentido, Valentín afirmó que la quioterapia ‘favorece la aparición de la anemia' que ha quedado demostrado que ‘a mayor número de ciclos se incrementa la media de pacientes con anemia', de tal forma que los enfermos que el 80 ciento de los enfermos que se han sometido a seis ciclos padecían anemia. Sin embargo los médicos no lo abordan que la determinación de los síntomas se basa en criterios subjetivos lo que no se utilizan herramientas objetivas para detectarlo. Esto se traduce en un tratamiento tardío y cuando el grado de anemia es considerable.
Ante esta situación, Valentín destacó la tancia de aumentar los niveles de hemoglobina en estos pacientes evitando realizar un gran número de transfusiones para conseguir ‘mejorar la calidad de vida del paciente disminuyendo la sensación de cansancio de estos pacientes para que puedan desarrollar el mayor número de actividades posibles'.
Tras la presentación de esta encuesta, algunos miembros de Onvida anunciaron la futura elaboración de una encuesta con el objetivo de conocer las necesidades de los pacientes oncológicos y conseguir presentar una muestra de las vivencias personales de los enfermos. Una vez que obtengan los 500 cuestionarios entregados en las consultas de oncología, se podrá conocer las preocupaciones y necesidades de los pacientes para solventarlas.
De este modo, la secretaria de Onvida y oncóloga del Hospital Universitario Virgen del Rocío de Sevilla, Ana Casas, señaló, experiencia en la consulta y adelantándose a los resultados, que en un prer momento el enfermo debe enfrentarse al diagnóstico y hay que procionarle la información que el solicita y que es capaz de asilar.
Una vez que ha asumido en cierta forma la noticia de la enfermedad, Casas apuntó que la ayuda se centra en sotar los efectos secundarios, entre los que destaca la astemia, estrechamente relacionada con la anemia, aunque apuntó que actualmente existen tratamientos ‘sotables' para los enfermos. Por otro lado se encuentran los enfermos crónicos, a los que les preocupa el control de los síntomas y su calidad de vida. ‘El largo superviviente quiere recuperar su vida social, su estado y capacidad cognitiva. En definitiva, su vida anterior', apostilló Casas.
Por su parte, Valentín reveindicó la necesidad de que los alumnos de medicina aprendan técnicas de comunicación en las facultades para que la transmisión de noticias delicadas como la aparición de un cáncer o una recaída no dependan de la habilidad comunicativa del médico. Al mismo tiempo, rechazó el uso de palabras como ‘terminal', que ofrecen una visión muy negativa del cáncer.
Por otro lado, el presidente de Onvida y jefe del Servicio de Oncología Médica del Hospital Clínico de Barcelona, Pere Gascón, señaló la necesidad de que los servicios de oncología dispongan de un mayor número de profesionales sanitarios para atender mejor a los pacientes y evitar la sobrecarga de trabajo de los doctores.
