La marca francesa Citroën lucha contra las distracciones al volante con nuevos sistemas

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Un 33% de los accidentes de tráfico se debe a una distracción al volante, así lo señala un estudio realizado RACC. Manos libres, control de radio en el volante, marcación voz… muchos son los sistemas que buscan combatirla. Los fabricantes de coches buscan y desarrollan las últas tecnologías en sus modelos. Uno de ellos es Citroën, que apuesta una pantalla virtual, la alerta de cambio involuntario de carril y el litador y regulador voluntario de velocidad, entre otros.  

Comer, fumar, encender la radio o manejar el navegador son algunas de las acciones que constituyen, junto al exceso de velocidad, las principales causas de los accidentes de tráfico. Así se desprende del estudio del RACC ‘La distracción de los conductores: un riesgo no percibido'. En su apuesta la tecnología, la creatividad y la lucha contra la distracción, Citroën permite la posibilidad de incorar en sus modelos algunos de los principales avances tecnológicos al respecto.

Modelos como el C4, C5 y C6 pueden estar dotados de una alerta de cambio involuntario de carril, que se encarga de avisar al conductor con una vibración en el asiento cuando el coche en cuestión supera una línea indicadora de carril si no se ha activado el intermitente y se circula a una velocidad superior a los 80 kilómetros hora. Según un informe elaborado FITSA (Fundación para el Instituto Tecnológico para la Seguridad del Automóvil), si este dispositivo estuviese incorado en todos los vehículos, se podrían llegar a evitar en España al menos 225 víctas mortales en accidentes de carretera.

Sin embargo, si un sistema ha destacado su novedad, se trata de la pantalla virtual que permite proyectar los datos de la conducción sobre el parabrisas. De esta forma, el conductor evita tener que desviar la vista de la carretera. Este sistema se puede incluir en el C6.

En lo que se refiere a velocidad, segunda causa de los accidentes de tráfico, el fabricante francés apuesta el litador y regulador voluntario de velocidad, que permite al conductor definir la velocidad que no desea sobrepasar, así como la ayuda a la frenada de urgencia (AFU). Este dispositivo acciona un segundo pistón, además del principal, generando una presión extra sobre los frenos y permite acortar la distancia de parada. 

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