El color púrpura, el Lago Ness, el whisky e incluso el lema ‘Pure dead brilliant’ tan propios de la zona, son algunos de los conceptos que están presos en todos y cada uno de los rincones de estas instalaciones.
Cato Partners ha aplicado esta nueva identidad a la marca, la señalética, el environmental design, los uniformes, el material de comunicación y al resto de elementos que conforman la arquitectura de marca, para que transmita, no sólo la filosofía de Infratil, empresa operadora del aeropuerto, sino también la esencia de Glasgow.
El objetivo de la nueva agen es dotar al aeropuerto de una personalidad propia que hace posible que los viajeros, nada más aterrizar, sepan dónde se encuentran y cuáles son los elementos distintivos de la zona.