El padre del llamado nuevo periodismo, autor de clásicos como ‘A sangre fría’ o ‘Desayuno con diamantes’, murió el 25 de agosto del 1984. Genio y figura que no dejaba a nadie indiferente y que continúa cautivando tras su muerte.
Excéntrico, de particular forma de expresarse, abierta homosexualidad y gran don de gentes, Capote supo ganarse poco a poco el afecto de personalidades de la alta sociedad, quienes le abrieron la puerta de sus casas.
A los 23 años publicó su prera novela, Otras voces, otros ámbitos, dónde plantea un tema corrosivo en aquellos tiempos, la homosexualidad. Aunque su trabajo más reconocido fue a los 41 con ‘A sangre fría’.
Pero no todo su éxito fue en la venta de sus novelas puesto que ‘Desayuno con diamantes’ fue llevada con sonoro éxito a la gran pantalla con Audrey Hepburn como protagonista al ganar dos Oscar.
Capote murió en Los Ángeles el 25 de agosto de 1984, a los 59 años, después de largos episodios de abusos de drogas y depresión, un estado en el que se sumió después de tocar el techo de su carrera y ser repudiado la alta sociedad neoyorquina.