Insólito. Un grupo de activistas del grupo The Clate Camp irrumpieron en las oficinas londinenses de Edelman para protestar el apoyo que la firma de Chicago ha prestado a la eléctrica Eon, que pretende reconvertir la actual estación eléctrica de Kingsnorth. Durante los 45 minutos que duró la protesta, Robert Phillips, CEO de la compañía, narró a través de Twitter el devenir de los acontecientos.
No era la últa película de Misión Imposible, sino una protesta ecologista en plena City: un grupo de ecologistas irrumpieron desnudos en las oficinas de Edelman Londres para protestar el hecho de que la compañía se esté lucrando a costa de auyudar a Eon, multinacional alemana que planea una reconversión de la estación eléctrica de Kingsnorth, una operación duramente criticada el pacto medioambiental que provocaría.
Sin embargo, lejos de perder la calma, los responsables de Edelman ofrecieron a los manifestantes la posibilidad de debatir (eso sí, vestidos) acerca de los motivos de la protesta. Así mismo, Robert Phillips, CEO de la firma en Londres, mantuvo informado en todo momento a los interesados a través de su Twitter.
A pesar de lo llamativo de la protesta, lo cierto es que la firma norteamericana ya sufrió en 2.008 una situación silar su relación con la empresa alemana. Entre las víctas de The Clate Camp se encuentran ilustres como RBS, BP, Shell o el aeropuerto de Heathrow.
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