La jefa del ejecutivo argentino hizo también referencia al debate generado en los medios en los últos días su polémica ley. ‘En algunos medios sólo se escuchan voces contrarias a la ley’, manifestó. ‘Este instrumento añadió va a servir para que todas las voces tengan la posibilidad de expresarse libremente. Por eso construos un colectivo y federal donde se reflejen todos y cada uno de los sectores, pueblos originarios, actores, periodistas, organizaciones de derechos humanos y cooperativas’.
Asismo, expresó que la ley ‘clausura otra etapa de la dictadura’ y agradeció a todos los sectores, incluidos partidos opositores y periodistas críticos, sus ataciones para la redacción, tras dos centenares de modificaciones, del documento final.
No obstante, no todo fueron facilidades al Gobierno en la jornada de ayer. La oposición volvió a proponer, durante la sesión en el Senado, la revisión de la ‘fe de erratas’ de la nueva Ley, para lo que necesitaba dos tercios de los votos de la Cámara, pero el kirchnerismo se lo pidió. El senador oficialista Miguel Pichetto explicó que a estas alturas no se puede tratar la ‘fe de erratas’ cuando ‘la ley fue votada con amplias mayorías y ya está promulgada’. Sin embargo, admitió que la oposición puede reabrir el debate la vía judicial.
Los denunciantes aseguran que la ‘fe de erratas’ que se envió al Senado, después de que el texto original fuera sancionado en el Congreso, no se litaba a renumerar artículos y corregir faltas de ortografía, sino que se incluyeron modificaciones en los artículos 95 y 124, lo que la ley ‘carece de ejecutoriedad’, al no haber sido ese el texto sancionado los congresistas. Por su parte, el kirchnerismo insiste en que se trata de un procediento habitual.
El últo de los puntos tratados en relación a esta Ley fue avalar el decreto con el que Néstor Kirchner aprobó cuando era presidente la renovación diez años de una serie de licencias de radiodifusión.
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